Cataluña abordará las nuevas pruebas de selectividad con profesores de Bachillerato
La consellera de Investigación y Universidades, Núria Montserrat.
En comparecencia parlamentaria, la consellera ha reconocido que les «preocupa» el nuevo modelo de las PAU, que aún no se ha detallado, aunque ha transmitido un mensaje de «tranquilidad» y ha dicho que «nadie tiene que sufrir» porque trabajan con la consellería de Educación para llegar a buen puerto. «Estaba previsto hacer las primeras reuniones en septiembre y estamos en calendario», ha añadido Núria Montserrat.
La consellera prevé que el presupuesto para su departamento en 2025 «esté cerca de los 1.500 millones», como pidieron de manera consensuada los rectores de las universidades públicas catalanas el pasado mes de abril en la denominada Declaración de Calonge. Ante la comisión parlamentaria donde ha desgranado los principales ejes de trabajo de la legislatura, la consellera ha afirmado hoy que «estamos en el momento de pasar de palabras a hechos», y que en 2025 «podemos llegar a los 1.500 millones de euros de financiación» para «dar respuesta a la petición de los rectores». En este sentido, ha asegurado que «estamos haciendo las gestiones para disponer de los recursos necesarios».
También ha dicho que trabajará para que haya «un nuevo modelo de financiación para las universidades, que se adapte a los requisitos de la LOSU (Ley Orgánica del Sistema Universitario), con redimiento de cuentas». Asimismo, siguiendo otra de las demandas de los rectores, ha dicho que entre sus objetivos está «dar estabilidad financiera al sistema universitario catalán» y «permitir preservar las singularidad de cada una de ellas».
Sobre el Plan de Inversiones Universitarias (PIU) para renovar las infraestructuras de los centros, ha expresado su «voluntad de aumentarlo» para «dar estabilidad a las universidades» y que en 2025 pretende «disponer de 100 millones de euros anuales, doblando la dotación actual», para lo que -ha asegurado- está «en conversaciones efectivas con la consellería de Economía».
En cuanto a alcanzar una financiación del 1% del PIB para R+D+i en 2030, como marca la disposición adicional 19 de la Ley de la Ciencia de Cataluña, Núria Montserrat ha dicho que «trabajará para consolidar y mejorar el nivel de financiación» y que una de las fuentes con las que cuenta son los 150 millones de euros anuales» que procederán de «la comisión mixta Estado-Generalitat». En este sentido, ha dicho que el Ministerio de Ciencia «transferirá cada año, con el aumento correspondiente del IPC», el importe para «impulsar la inversión en infraestructura y proyectos estratégicos en toda Cataluña», y que estos fondos que «se unirán a los propios de la Generalitat».
Entre los centros «de excelencia» en los que se invertirá, la consellera ha citado el Sincrotón Alba, el Barcelona Suprecomputing Center, el Centro de Análisis Genómica o la descarbonizacion de la industria de Tarragona. Núria Montserrat también ha anunciado que en los próximos meses se elaborará un «un nuevo modelo de financiación, vinculado a la definición de indicadores y a su consecución» para los centros CERCA. En cuanto al horizonte de la investigación, ha dicho que aspiran en 2030 a situar «Cataluña entre las 50 regiones más innovadoras de Europa», mejorando su situación actual, que está «por encima de la media de Europa».
Otro de los ejes principales de trabajo mencionado por la consellera ha sido «potenciar la transferencia del conocimiento» y en, este sentido, ha afirmado que «trabajaremos para poner en contacto a todos los agentes de la cadena de valor» con el fin de que «el conocimiento pase de los laboratorios, universidades y centros de investigación a las empresas, y de ellas, a la sociedad». Entre los próximos 3 y 6 meses ha anunciado que articulará, junto a la consellería de Política Lingüística, un calendario de actuación para «garantizar el uso del catalán como lengua propia en universidades e investigación». Algunas de las medidas que se articularán en este ámbito son el impulso de la instalación de los buzones para preservar los derechos lingüísticos de los estudiantes y aumentar la docencia en catalán, especialmente en grados de educación, sanidad, justicia o comunicación porque son profesiones que implican contacto directo con la sociedad.
En cuanto al uso del catalán en los centros de investigación, Núria Montserrat ha remarcado que «implica abordar retos para hacer compatible el uso de esta lengua con otras 15 internacionales». «Queremos que el catalán conviva y sea complementario con la internacionalización» ya que «su uso no entorpece el de ninguna otra lengua», ha afirmado la consellera.