El 87% de los docentes afirma no haber recibido formación en Inteligencia Artificial
En los últimos años, la integración de la inteligencia artificial en las aulas ha evolucionado hasta el punto de alterar la forma en que los estudiantes realizan sus tareas académicas y se preparan para sus exámenes.
Alma Mallo, profesora del Curso de IA para Docentes de Tokio School, explica que “en el curso 2022/23 se empezó a utilizar la IA en los colegios, pero es en el 2023/24 cuando se ha extendido su uso”. Esta expansión se refleja en cómo los estudiantes utilizan este tipo de herramientas: un 58% las utiliza para hacer trabajos, un 56% como complemento a los contenidos de las asignaturas y la mitad para estudiar y preparar exámenes, según el informe El Impacto de la IA en la Educación en España.i9
El uso de la IA en las aulas está cambiando el propio proceso de aprendizaje de los alumnos.
Aunque algunos se apoyan en estas herramientas para resolver sus dudas, Mallo concreta que hay un problema con algunos alumnos que «utilizan ChatGPT para que realice los trabajos por ellos”.
Esto hace que haya que replantear cómo medir el verdadero aprendizaje de los estudiantes. En este sentido, parece claro que hay que formar a los docentes para que sepan utilizar la inteligencia artificial. El estudio Monitor Global de Educación de Ipsos revela que un 65% de encuestados en 29 países creen que los maestros deben recibir formación en IA, un porcentaje que en España alcanza el 62%.
Según el mismo estudio, un 65% de los docentes teme que aumente el plagio por el uso de estas herramientas. También preocupa la disminución de la interacción entre alumnos y profesores en el aula.
Entre la comunidad educativa, estas herramientas despiertan tanto entusiasmo como preocupación. Si bien utilizada de forma adecuada puede ser beneficiosa, Mallo recuerda que «puede ser peligrosa si los estudiantes solo la utilizan para que ‘les haga los deberes’, evitando que aprendan a pensar y resolver problemas por sí mismos».
De ahí que sea fundamental educar a los educadores. Un 87% de los docentes afirma no haber recibido capacitación, lo que genera inquietud sobre el uso de estas herramientas, según el estudio Future Ready Education del Instituto de Investigación Capgemini. A pesar de este desafío, el 55% afirma que la IA ha mejorado los resultados educativos.
Mallo insiste en que la clave está en «explicarles en qué consiste, sus ventajas e inconvenientes, para que puedan reflexionar sobre las posibilidades que ofrece».
Los chatbots como ChatGPT ya son herramientas populares, utilizadas por el 40% de los alumnos, el 31% de los padres y el 22% de los profesores para obtener información. Sin embargo, el verdadero potencial de la IA en clase podría estar en los sistemas de tutorización inteligente (ITS), diseñados para ofrecer un aprendizaje más personalizado y adaptado a las necesidades individuales de cada estudiante.
Estas innovaciones están ganando terreno, con ejemplos destacados como Khanmigo de Khan Academy y el nuevo ITS de Duolingo, que ajustan el proceso de aprendizaje en función del progreso del estudiante. En España, los investigadores del CITIC, en la Universidade da Coruña, están a la vanguardia de este avance, con el desarrollo de ProgTutor. Este ITS, respaldado por un proyecto del Ministerio de Educación, se centra en la enseñanza de la programación en Python mediante la robótica, utilizando RoboboSIM, un simulador del robot Robobo, desarrollado en MINT SL.
Según Mallo, “la IA seguirá integrándose cada vez más en las aulas”. Este avance promete personalizar el aprendizaje, pero también ofrecer nuevas oportunidades tanto para estudiantes como para docentes, adaptando la formación a los avances sociales.
