Canarias ya destina un millar de efectivos extraordinarios a 4.689 alumnos con necesidades educativas
La Consejería de Educación del Gobierno de Canarias atiende ya este curso con recursos extraordinarios a más de 4.689 estudiantes con necesidades educativas, 1.689 más que el curso anterior, cuando, a su vez, ya había duplicado la cifra de alumnado atendido con estos recursos. Así lo confirmó el pasado viernes en la Comisión de Educación del Parlamento el responsable regional del área, Poli Suárez, quien detalló que la Consejería cuenta para este fin con 1.076 profesionales no docentes.
En concreto, se han contratado auxiliares de enfermería (pasando de los 169 del curso pasado, a los 215 de los que va de este), adjuntos de taller (108 frente a 96), o especialistas en lengua de signos española (18 frente a 7), a los que se suman cuidadores y cuidadoras, personal de enfermería o fisioterapeutas, entre otras categorías.
De ese personal, la mayoría presta servicios a través de la empresa Aeromédica y el resto lo hace a través de la Secretaría General Técnica, aunque “se realizan solicitudes de efectivos a diario y pueden estar cambiando en estos mismos momentos” para “garantizar una apuesta educativa basada en la equidad y la inclusión”, según Poli Suárez, quien recuerda que, al llegar a la Consejería, en julio de 2023, “nos encontramos” con que el servicio para atender con recursos auxiliares al alumnado con discapacidad, TEA, trastorno grave de conducta o especiales condiciones de salud se prestaba a través de la empresa Aeromédica Canaria SLU.
Sin embargo, el citado servicio “se encontraba en situación de nulidad desde marzo de 2021” y con un modelo de gestión que había llevado a incrementar el presupuesto “de manera exponencial”, pasando de los tres millones de euros de 2016 a los diez millones de 2020, cuando vence el contrato, para, finalmente, alcanzar los trece millones en 2022, y superar los dieciséis en 2023.
Mejoras necesarias
En ese sentido, Suárez recuerda que hay “varios aspectos que debemos mejorar”, como la actualización de la normativa en materia de necesidades específicas de apoyo educativo (NEAE), “para dar más facilidades” y “estar al lado de las familias, y de los niños y de las niñas”, y la licitación, al fin, del nuevo contrato del personal para atender a este alumnado, de forma que deje de estar en nulidad y permita que Canarias se pueda “acoger al 85 por ciento de fondos europeos, con lo que podríamos llegar aún a más niños y niñas”.
Por ello, aunque “no cabe duda” del “esfuerzo que se está haciendo y de que hemos mejorado, mucho, la gestión, los datos estadísticos y la atención que está recibiendo este alumnado”, “debemos seguir siendo ambiciosos” y “trabajando para mejorar” porque “somos muy autoexigentes y autocríticos”, según el consejero, quien aboga por “dar más autonomía a los centros a la hora de atender a su alumnado”, en primer lugar, con los recursos ordinarios con los que ya cuentan y, en caso de ser necesario, reforzando con recursos extraordinarios, en un contexto en el que “cada vez más” existe “más alumnado con necesidades educativas especiales”.
“Apostamos el todo por el todo por atenderlos de la mejor manera posible, y no vamos a escatimar en inversión, inversión, que no gasto, pero se hacía necesario un cambio en el modelo de gestión de estos recursos, recuerdo, totalmente extraordinarios”, concluye Suárez.