Carla Serrano: "El arte ayuda al joven a ser crítico y sensible, menos vulnerable ante algunos disparates de las redes sociales"
Carla Serrano (@la.inercia en Instagram), historiadora gallega del Arte, se ha convertido en una voz cercana y rigurosa para acercar su materia a nuevas generaciones. En esta entrevista, habla de sus motivos para escribir Una historia del arte muy rápida (Ediciones B, 2025, 288 páginas, 21,90 euros) la necesidad de formar el gusto a través del conocimiento, y del papel que pueden jugar los docentes en despertar una mirada crítica y sensible en el aula. La referencia a la rapidez aparece en los vídeos de Instagram en los que resume, en un minuto, temas como La Sagrada Familia, la Cúpula de Florencia, las partes de un templo griego, la Fontana de Trevi, y otros muchos temas de arte y cultura.
¿El lenguaje menos formal facilita la conexión con los jóvenes?
–Sí, aunque es un libro para todos los públicos, mi manera de comunicarme es muy cercana a la gente joven. Creo que puede servir perfectamente como punto de entrada al arte para estudiantes. Utilizo un lenguaje más directo, menos académico, pero sin perder rigor, porque quiero que entiendan el arte como algo vivo, no como una lista de datos inamovibles. Les ayuda a ver la cultura de otra manera.
Tiene más de 200.000 seguidores en Instagram. ¿Cuál es la clave para conectar con la gente interesada en arte y cultura?
–Creo que la gente puede sentirse un poco intimidada por cómo comunican algunos especialistas. Ahora ya no, porque hay más canales de divulgación. Mostrarte cercana hace que la gente te coja cariño y que quieran saber qué vas a contarles ahora o qué curiosidades tienes guardadas, para desarmarles un poco en cosas que quizá daban por hechas y que no son así. Por eso me esfuerzo mucho en transmitirles cariño. Los que me siguen aprecian ese estilo directo; además, intento que mis vídeos sean breves pero muy cuidados. La gente agradece aprender algo nuevo sin tener que comerse vídeos muy largos.

En el libro dice que el arte no es solo para “sentirlo”, sino que hay que explicarlo, comprenderlo. ¿Va un poco contra la idea actual de que solo importa lo que se siente?
–Totalmente. Esa idea de que «el arte solo hay que sentirlo» me parece muy limitante. ¿Cómo vas a sentir profundamente una pintura rupestre si no sabes nada de su contexto? La Paleta de Narmer, una piedra ceremonial de ese faraón datada hacia el 3.100 antes de Cristo, por ejemplo, no te dice gran cosa si no sabes qué representa o qué simboliza. Me da la sensación de que últimamente se limita mucho la Historia del Arte. Se defiende a veces que el arte abstracto hay que sentirlo, pero yo he estudiado una carrera de cuatro años y te garantizo que el sentir hay que entrenarlo. Sentir forma parte del conocimiento que adquieres. Si una persona te explica una obra de arte que antes te hacía sentir, te garantizo que después lo sientes muchísimo más porque entiendes el código. Al final el arte es un lenguaje y hay un código que tienes que entender para comprenderlo. Las Meninas no es una obra que vaya a crearte una sensación espectacular si no entiendes todo el fondo que hay detrás, todo el contexto, lo que era Velázquez, el barroco español. Hay que sentirlo, evidentemente, pero con una cultura y un bagaje detrás seguro que lo sientes mucho más.
En un contexto de retroceso de las Humanidades, ¿el arte es útil para afrontar un ritmo de vida de creciente angustia?
–Yo me dedico en el día a día al marketing digital, algo lleno de números, pero creo que tener esa sensibilidad por la cultura, por el arte, las Humanidades en general, te hacen ver la vida de forma más crítica y objetiva y que no te coman tanto el tarro en otros aspectos de la vida, algo que se está viendo muchísimo en la gente joven. Las redes sociales están poniendo a su alcance cosas muy buenas y cosas muy negativas, apartándolos del pensamiento crítico y de la sensibilidad artística. A lo mejor eso hace que se crean absolutamente todo lo que les dice cualquier persona y que les metan ideas extrañísimas en la cabeza, como que debajo de las Pirámides hay tubos gigantes y cosas por el estilo. Carecer de criterio nos aleja de ser personas socialmente sensibles ante lo que pasa en nuestro contexto, con las personas que viven a nuestro alrededor.
Las Humanidades hacen ver la vida de forma más crítica y objetiva, y a ser sensibles con las personas que viven a nuestro alrededor
"Aunque son breves, se nota que detrás de sus vídeos de Instagram hay mucho trabajo. ¿Compensa por el gusto de ver que la gente aprende con ellos o por el dinero?
–Podría decir que en un 80% es por el gusto y solo en un 20% por lo que se gana. Si me sale alguna colaboración y es chula, como escribir el libro, la hago, y cuando hay publicidad lo indico. Si en algún momento puedo dedicarme a esto, genial, porque no tendré que trabajar 16 horas al día. La verdad es que he sacrificado muchísimo tiempo libre para hacer esto, porque le dedico muchas horas.
¿Qué experiencias culturales aconseja a quienes no puedan permitirse viajes o visitas a museos?
–Creo que leer es lo mejor y lo más accesible. Hoy hay mil medios para leer un montón de artículos y hay que despertar la curiosidad de la gente, porque se está perdiendo. Hay recursos como la web del Museo del Prado que hablan de muchísimos cuadros desde una perspectiva muy cercana. Un recurso en el que entro todos los días porque me encanta es la aplicación Arts de Google, donde todos los días suben alguna curiosidad artística y tienen un montón de juegos. Tienen un experimento en el que ponen música a las obras de Kandinski, y mucho material didáctico súper interesante. Es una forma de despertar la curiosidad entrando en el código de la gente joven, que está acostumbrada a tenerlo todo rápido, y es necesario evitar que esa velocidad lleve a no pensar lo más mínimo. Actualmente el Chat GPT te arroja una respuesta súper rápida a preguntas muy complejas. Hay gente que ni siquiera está yendo al psicólogo porque le cuenta sus problemas a Chat GPT y este te dice lo que hacer, lo cual me parece una auténtica locura. Pero en los comentarios de Tiktok se ve que la gente joven se está acostumbrando a eso. Adoptan opiniones súper random porque básicamente las han visto en un vídeo y les han parecido bien sin buscar más allá de eso. Y no puede ser: hay que formarse una opinión crítica. Me da mucho miedo, porque yo hice mi trabajo fin de grado (TFG) consultando millones de libros, y actualmente no sé cómo se estará gestionando eso. Estoy bastante segura de que habrá muchos trabajos copiados y pegados directamente de GPT sin ni siquiera haberlos leído.
Hice mi Trabajo Fin de Grado (TFG) consultando millones de libros. Ahora estoy bastante segura de que habrá muchos copiados y pegados directamente de Chat GPT sin ni siquiera haberlos leído
"¿Agradece a los profesores que usen sus vídeos y ahora su libro en clase?
–Muchos profesores me siguen o me paran y me dicen: «Oye, pongo tus vídeos en clase». Mola mucho ver que es cierto que los profesores se están esforzando en meterse en el código de los chavales, no solo por poner mis vídeos, sino por intentar influenciarlos de una manera positiva.