El desarrollo socioemocional del alumno, una garantía de su éxito futuro
“Cada vez está más comprobado cómo las competencias socioemocionales tienen un impacto muy directo en el éxito académico, pero sobre todo en el desarrollo de las personas de cara a una gestión emocional eficaz en el futuro”. Lo asegura Francisco José Cuadrado, profesor de Educación de la Universidad Loyola Andalucía y responsable científico del proyecto Learning to be en España. Según este profesor, “el creciente incremento de las tasas de fracaso y abandono escolar tiene mucho que ver con esta falta de Educación emocional en niños y jóvenes”.
Learning to be se enmarca dentro del programa Erasmus+ KA y ha unido a administraciones educativas, profesores e investigadores de siete países europeos: Finlandia, Italia, Letonia, Lituania, Portugal, Eslovenia y España. “Este tipo de proyectos no son de investigación, sino que pretenden desarrollar nuevas políticas europeas a nivel de innovación en Educación y, más concretamente en este caso, en competencias socioemocionales.
El objetivo no es medir, sino proponer herramientas, evaluar el uso de esas herramientas y, sobre todo, poder marcar líneas de desarrollo en Educación desde Europa”, explica Cuadrado.
Esa obsesión por la nota, por el currículum y por los contenidos está dejando de lado algo tan importante como la Educación emocional y social de los niños
"La iniciativa ha sido desarrollada bajo la premisa de que la evaluación del aprendizaje en las escuelas europeas contemporáneas debería ir más allá de calificar el conocimiento y el desarrollo académico de los estudiantes y debería incluir prácticas para observar el desarrollo personal, las habilidades sociales, las actitudes y otras habilidades generales de los jóvenes. “Esa obsesión por la nota, por el currículum y por los contenidos está dejando de lado algo tan importante como la Educación emocional y social de los niños”, lamenta el profesor de la Universidad Loyola.
Learning to be comenzó en 2017 con una primera fase de recopilación de información en torno a proyectos de inteligencia socioemocional. A partir de ahí, todos los socios del proyecto elaboraron un toolkit o conjunto de herramientas para fomentar las habilidades socioemocionales en los alumnos de Primaria y Secundaria de los colegios participantes –20 por cada país–.
Ahora mismo el proyecto, que está llegando a unos 1.000 alumnos en España, se encuentra en la fase de implementación de esas herramientas. El objetivo es que, una vez que concluya el proyecto en enero de 2020 y tras varios procesos de evaluación, todos los resultados se puedan elevar a futuras políticas europeas.
El proyecto incide en el fomento de las habilidades sociales y relacionales de los alumnos porque entiende que redunda en comportamientos más favorables y niveles más altos de comprensión. Sin embargo, esta idea a veces es difícil de trasladar a la mentalidad que existe en la propia comunidad educativa.
Francisco José Cuadrado comenta que los profesores de los colegios donde se desarrolla el programa muchas veces preguntan cómo hacer entender a los padres que tan importante es la Educación emocional como la nota de Matemáticas o Lengua. “Cuando a un padre le preocupa más la nota de Matemáticas que si su hijo tiene depresión infantil, eso sí es una alarma de hasta qué punto no estamos teniendo claras las prioridades y valores que queremos transmitirle”, advierte Cuadrado.
“El trabajo sobre las emociones pasa primero por ser consciente de la emoción que estás sintiendo, conocerla, saber identificarla, saber qué te la provoca y saber gestionarla. Estamos más allá que una mera expresión de sentimiento, se trata de entender por qué sientes una emoción en un momento determinado, entender las emociones de la otra persona, ponerte mucho en lugar del otro, y eso va trazando un camino que te lleva hacia una madurez emocional”, explica el responsable de Learning to be.
El profesor destaca esa importancia de adquirir madurez emocional, sobre todo en la adolescencia, una etapa de la vida en la que resulta positivo saber gestionar esas emociones y entender las de los demás: “Comprender la emoción de otro pasa por entender a esa persona, por respetarla y valorarla. El saber gestionar tus emociones y, sobre todo, el saber relacionarte socialmente con otras personas también pasa por una serie de valores éticos, humanos y de respeto tan importantes a esas edades para evitar casos de acoso, desprestigio de otras personas o enfrentamientos”.
Comprender la emoción de otro pasa por entender a esa persona, por respetarla y valorarla
"Por último, Cuadrado destaca el carácter práctico de la Educación emocional: “Si queremos educar emocionalmente, no lo vamos a conseguir haciendo que alguien se lea un texto o vea un vídeo. Estas cosas hay que trabajarlas”. De ahí que muchos de los recursos de ese toolkit para los profesores estén basados en actividades y dinámicas muy prácticas.
'Learning to be'
- Modelo integral para la evaluación social, emocional y de las habilidades saludables. El modelo servirá como base teórica y metodológica para el aprendizaje socioemocional y para su evaluación en Primaria y Secundaria.
- Toolkit o conjunto de herramientas destinado a profesores y alumnos. Incluirá herramientas de (auto)evaluación tanto para estudiantes como para profesores.
- Instrumentos de autoevaluación institucional para los centros. Esto ayudará a las propias escuelas (Administración, comunidad, proveedores, etc.) a evaluar la situación del aprendizaje socioemocional en el colegio.
- Recomendaciones para revisar las políticas sobre habilidades socioemocionales y de salud. También, análisis de los resultados del proyecto en relación con las políticas educativas existentes y los planes de estudios nacionales a fin de apoyar y facilitar la mejora de las reformas políticas positivas en Europa.
Muy interesante. A veces no es tan difícil que los padres entiendan lo importante que es la educación emocional y el desarrollo de las fortalezas en sus hijos. He llevado a cabo un método que yo misma diseñé durante dos cursos y la acogida por parte de mis alumnos y sus familias fue extraordinaria. Para mí, ha sido un punto y aparte en mi carrera profesional. Hoy en día, no podría trabajar de otra manera. Centrar el aprendizaje en el desarrollo interior del alumnado es posible, sin dejar al margen el currículo. El clima de clase mejora, la convivencia es más fácil, los conflictos menores y el rendimiento académico no se queda atrás. Conocer el Método Losias en http://www.metodolosias.com