El trabajo en equipo, un impulso a la motivación

Este II Encuentro Nacional de FP partía de un mensaje claro: “En solitario puedes alcanzar tu objetivo, pero solo juntos podemos superarlo”. En consecuencia, se organizaron 21 mesas de trabajo con más de 600 personas participando activamente, dinamizadores regionales, nacionales e internacionales, dinámicas con presentaciones, con casos prácticos, con normativa… El objetivo de estos talleres consistió en extraer, a partir de una serie de planteamientos iniciales, posibles acciones y líneas de trabajo susceptibles de acometer para seguir avanzando.

Esta mesa estuvo dirigida por Manuel Fanjul, director del CIFP “Mantenimiento y Servicios a la Producción” de Langreo (Asturias), que explicó la experiencia de su centro, puntero en la Educación basada en proyectos.

¿Cómo se determina un reto para llevar a cabo un proyecto? “El equipo docente debe ser honesto y debe coordinar Educación, empleo, sindicatos y patronal”, aseguró Fanjul. Además, “debe convencer al equipo directivo y no preocuparse de que el proyecto no salga, pues el objetivo principal es que el alumno aprenda. También es muy importante el marketing, pues hay que vender el reto al alumno”.

¿Cómo se lleva a cabo una metodología por retos? Según el director del centro asturiano, “hay que partir de los conocimientos previos del alumnado y, sobre todo, de un plan que permita adquirir unidades de competencia”. Lo ideal, a su juicio, es “contar con alumnos con experiencia previa, y que el proyecto tenga una imbricación entre empleo y Educación a través de las unidades de competencia”.

¿Cuál debe ser el papel del profesor? “Debe salir del aula y no esperar a que la Administración autorice los proyectos planteados, pues siempre son un incentivo para seguir trabajando”, advierte Fanjul. Por su parte, “los alumnos deben visitar empresas, de modo que se vean incentivados de cara a su inserción laboral”.

Los participantes en esta mesa de trabajo defendieron las siguientes actuaciones:

• Habilitaciones temporales para profesionales que posean competencias pero no puedan acreditarlas por titulaciones oficiales.
• Utilizar big data para que las administraciones puedan ofertar formación según las necesidades reales de los ciudadanos.
• Convocatoria permanentemente abierta de Procedimientos de Acreditación (Prear) en todas las especialidades y con sede en las empresas para que puedan acreditar y dar las titulaciones a sus trabajadores.
• Mentalizar a las empresas para que seleccionen RRHH a partir de cualificaciones profesionales, independientemente de títulos, y fomenten la formación y acreditación de sus trabajadores.
• Mayor colaboración entre la orientación y la Formación Profesional.
• Potenciar la formación modular.
• Mayor implicación de los sindicatos, anticipándose a las necesidades de formación de los trabajadores.
• Triaje de certificación: valorar y priorizar los casos más urgentes por parte de la Administración.
• Incluir compromisos de formación en los convenios colectivos.

  Los asistentes destacaron los siguientes puntos:

• Anexo informativo para el tutor de empresa.
• Visita de un día del tutor del centro a la empresa.
• El “primer día” en la empresa es crucial.
• Charlas de motivación a los alumnos por las empresas.
• Coordinador de Dual en los centros.
• La beca es una motivación aunque haya empresas reticentes.
• Más difusión e información de dual a centros, empresas, alumnos…
• Reconocimiento a las empresas de FP dual.

La FP Básica no solo ha contribuido a reducir la tasa de abandono temprano, sino que también ha recuperado a personas que se encontraban totalmente fuera del sistema educativo, desmotivadas y en un claro riesgo de exclusión social.

Los participantes coincidían en que el profesorado de estas enseñanzas debe participar en la elección de los alumnos y conocer mejor sus expedientes. También consideran que es necesario establecer dinámicas de grupo y reforzar las habilidades sociales.

Todos coincidieron en que los estudios de FP Básica son inclusivos. Por tanto, debe mantenerse la concesión del título de la ESO a quien la supere, sin menoscabo de suspender a quien lo merezca. Asimismo, debían concertarse reuniones semanales de todo el equipo docente y dar más flexibilidad a los contenidos del currículo.

Como conclusiones se señaló la necesidad de actualizar los currículos por grupos de trabajo, teniendo en cuenta las aportaciones de los tutores de Formación en Centros de Trabajo (FCT). También se consideró preciso dotar de mayor dinamismo a la actualización de los títulos de la FP.

Los participantes resaltaron la conveniencia de mantener colgada en la web la normativa, para que así sea más accesible. Por último, gran parte del profesorado participante en el taller consideró que los alumnos no tienen que realizar la FCT si cuentan con algún módulo suspenso.

El alumno que cursa la Formación Profesional a distancia suele combinar estudios con vida laboral y familiar, por lo que no tiene, de forma general, el tiempo necesario para finalizar unos estudios de FP en dos cursos académicos.

Partiendo de esa perspectiva, los participantes consideraron que es necesario establecer la matrícula modular desde el principio y sin restricciones para todo el alumnado de FP a distancia. Asimismo, estuvieron de acuerdo en la necesidad de recomendar itinerarios formativos para realizar la matrícula modular, en función del tiempo del que se disponga, para acabar un ciclo a distancia en tres, cuatro o cinco años.

En primer lugar, el experto en innovación educativa, Richard Gerver, realizó sus propias aportaciones:

• No hay que tener miedo de la tecnología. El profesor puede aprender también del alumno, y la tecnología puede ser la manera de llegar de forma más efectiva a nuestros alumnos.
• Está ampliamente demostrado que los alumnos aprenden de forma más fácil y efectiva de otro compañero que de lo que enseña un profesor.
• Debemos apoyar a aquellos estudiantes a los que les cuesta más trabajar en equipo e ir introduciendo tareas poco a poco.
• Debemos introducir elementos de sorpresa en nuestra práctica docente para que el alumno no se acostumbre a que siempre se le cubran todas sus necesidades de la misma forma. El mundo de hoy es cambiante y lo mejor que podemos hacer es formarlos para ese cambio.

También los profesores expusieron sus propias aportaciones:

• Muchos centros de la Región trabajan ya de manera colaborativa. Hay elementos que aúnan a profesorado de varias etapas (huertos escolares, proyectos con base en la música, animación a la lectura…) y en FP existen ya en marcha multitud de proyectos, que implican a empresas, a otros ciclos que se imparten en el mismo centro y a otros centros. Todos estos proyectos suelen recibirse con entusiasmo por parte del alumno.
• También se entiende que para favorecer los proyectos colaborativos se deberían adaptar espacios específicos, horarios más flexibles y estudiar la normativa de evaluación.

Los participantes en los talleres defendieron la necesidad de trabajar en la FP modular, actualizando los los currículos de las familias profesionales, para adecuarlos a la cambiante realidad. Añadieron también que se debía permitir que proyectos propios de centros pudiesen adaptar los currículos oficiales, como por ejemplo el internet de las cosas. Por otro lado, se destacó la necesidad de favorecer la adaptación de los perfiles profesionales a los alumnos NEE.

Los CEPA van a ser clave en la lucha para formar a aquellas personas que, por diferentes motivos, abandonaron el sistema educativo. En la actualidad se está impulsando la FPB y la PFP en un ambicioso programa llamado Enfoca, que posibilitará que los alumnos con diferentes capacidades puedan seguir un itinerario hecho a medida con el objetivo de conseguir un trabajo, el  mejor antídoto para vivir una vida autónoma.

El funcionamiento de los CEPA es muy flexible, los grupos son heterogéneos, sus alumnos tienen diferentes motivaciones, se encuentran con los problemas de inserción sociolaboral…

Uno de los hándicaps en la Educación de Personas Adultas es la falta de información que existe sobre la oferta educativa. Los participantes se mostraron de acuerdo en que es necesario difundir la oferta existente en este tipo de estudios, por ejemplo, participando en ferias de FP, promoción práctica, puertas abiertas, potenciar las redes sociales, publicidad institucional…

También consideraron necesaria la FPB en los centros de adultos, pero propusieron ampliarla introduciendo certificados de profesionalidad de nivel I para mejorar la oferta, y de nivel II para completar los perfiles del centro.

• Ampliar la bolsa de empresas para la realización de la FCT en las diferentes enseñanzas de FP, especialmente en Básica.   
• Buscar la colaboración de las empresas para adaptar el currículo de Prevención de Riesgos Laborales a las necesidades del módulo de FCT.
• Aplicar la normativa vigente sobre derechos y deberes del alumno por parte del centro educativo en caso de conflicto del alumno en el centro de trabajo.
• Flexibilizar el programa curricular, cumpliendo las capacidades del módulo para favorecer la inclusión de las personas con diversidad funcional y otras necesidades.

• Habilidades más importantes: trabajo en equipo, resolución de problemas, comunicación efectiva, adaptación, definición de metas, autoimagen positiva y cuidado de la imagen externa, autonomía, uso ético y responsable de las TIC.
• Es necesaria la formación del profesorado, más coordinación, trabajo en equipo, tutoría en FP…
• Actividades posibles: simulaciones del entorno de trabajo, juegos de rol, exalumnos como mentores, proyectos colaborativos, escape room, diario de errores, concursos…
• Reconocimiento: mención de honor, porcentaje de nota del módulo, valoración por las empresas, pasaporte soft skills.