Iñaki Ortega: “El móvil, bien usado, es una escuela de valores para la vida”
Dirige Deusto Business School y es profesor de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR). Iñaki Ortega es también uno de los autores del libro Generación Z. Todo lo que necesitas saber sobre los jóvenes que han dejado viejos a los millennials, donde analiza con profundidad el último salto generacional.
¿Se entiende la Educación de la Generación Z sin tecnología?
—No. De hecho es uno de los elementos que define a la Generación Z, que ha nacido y, por tanto, se ha educado y socializado con internet. Las anteriores generaciones hemos recibido la tecnología e internet ya con nuestra personalidad forjada, pero nunca antes en la historia, una generación tan joven había utilizado internet en sus hogares, en sus colegios y con sus amigos, y esto marca la personalidad de esta generación.
Sin embargo, muchas veces se pone la tecnología en tela de juicio.
—Esto ha sido un clásico a lo largo de la historia: las generaciones no entienden a las inmediatamente anteriores. Por tanto, es normal que muchos padres no entiendan a sus hijos de la Generación Z y consideren que abusan de la tecnología.
Los móviles pueden utilizarse para la Educación, para estudiar mejor, pero eso no quiere decir que tengamos que utilizarlos siempre
"Pero también a nivel educativo.
—El sistema educativo es rígido y los cambios exigen más tiempo porque están sujetos a normas, usos y costumbres centenarios y milenarios. La forma de enseñar no ha cambiado en los últimos 500 años, y ahora de repente tiene que cambiar radicalmente por la irrupción de internet. Dicho esto, los cambios están siendo muy rápidos, y una demostración de ello es lo que estamos viviendo estos días con la crisis del coronavirus y cómo tenemos que adaptarnos a marchas forzadas. Aquellos sistemas educativos que afrontan esta crisis con la enseñanza a distancia demostrarán que están preparados para el presente, no ya para el futuro.
¿Qué opina sobre la prohibición del móvil en clase?
—Que el deporte sea bueno, no quiere decir que estemos haciendo deporte a todas horas. Que sea bueno trabajar en equipo, tampoco quiere decir que tengamos que estar trabajando en equipo todo el tiempo. Habrá momentos también de reflexión, de estudio… Pues exactamente igual con internet. Los móviles pueden utilizarse para la Educación, para estudiar mejor, pero eso no quiere decir que tengamos que utilizarlos siempre. Es decir, que el móvil puede ser un excelente medio de aprendizaje y debe ser regulado como cualquier otro medio de aprendizaje.
Se trata es de adaptar un sistema educativo más antiguo a uno más actual, que pueda ser más interactivo y más retante para los alumnos
"¿Debería incidirse más en la formación para un uso educativo del móvil?
—Internet permite el acceso a todo tipo de conocimiento, pero también el acceso a muchos peligros. Por eso internet y el móvil son también una escuela de valores. Me explico: saber usar el móvil con responsabilidad, con prudencia, con pragmatismo y con mesura son valores magníficos que deben aprenderse y que servirán para el móvil, pero también para todo en la vida. Por eso, el móvil bien usado es una escuela de valores para la vida.
¿Qué cambios deberían hacerse a nivel educativo para adaptarse a esta generación?
—Siempre se ha pensado erróneamente que los cambios tienen que ver con inversiones tecnológicas. Yo creo que eso es algo ya superado. Hoy todos los centros educativos tienen internet en sus aulas, y por tanto tienen acceso a esa tecnología. Aquí lo que se trata es de adaptar un sistema educativo más antiguo a uno más actual, es decir, que pueda ser más interactivo, más retante para los alumnos, más participativo, más colaborativo y que se centre cada vez menos en la clase magistral. Hay que poner en práctica la flipped classroom, una clase más cooperativa, más participativa, más retante y más motivadora para los alumnos.
Es importante desdramatizar la visión peyorativa de las redes sociales. Son el formato de este momento y hay que gestionarlas con prudencia
"¿Hace falta también un cambio de mentalidad en el profesorado?
—Todavía queda mucho camino por andar, porque es un cambio disruptivo y es normal que todavía estemos en el proceso, pero yo soy optimista y creo que los docentes tienen muchas ganas de disponer de las herramientas y las capacitaciones necesarias para poder liderar este cambio.
Los padres tienen también un papel determinante.
—Y es también cultural, pero insisto en que situaciones como las que estamos viviendo estas semanas con la crisis del coronavirus, nos van a ayudar a desdramatizar y a relativizar cuestiones como la enseñanza o el trabajo a distancia.
¿Cómo influyen las redes sociales en la Educación?
—Son una demostración de las nuevas formas de comunicarse y de los nuevos formatos que existen en este momento, igual que lo fue la radio o la televisión en su día y cada corte de edad ha tenido sus formas de comunicarse. No es ni mejor ni peor que las anteriores. El abuso de la televisión o de la radio también podría llevar a situaciones problemáticas. Es importante también desdramatizar la visión peyorativa de las redes sociales. Son el formato de este momento y lo que hay que hacer es gestionarlas con prudencia.
El reto es que no choque esa rapidez de los jóvenes con la lentitud del mundo que les rodea
"¿Cuáles van a ser los trabajos de esta generación?
—Las profesiones de esta generación van a tener que ver, por ejemplo, con la telemedicina, el análisis de datos, la ciberseguridad, la enseñanza a distancia o cómo saber gestionar los datos.
¿Cuáles son los retos de esta generación?
—Tienen todas las herramientas a su disposición para hacer un mundo mejor, pero el mundo todavía va muy lento. El reto es que no choque esa rapidez de los jóvenes con la lentitud del mundo que les rodea. Por tanto, tienen que saber adaptarse al ritmo que va el mundo, y también al revés, el mundo debe saber adaptarse al ritmo de esta generación.
¿Qué problemas se les van a presentar?
—Los problemas se les están presentando ya, y tienen que ver con esa rapidez con la que viven y que termina generando fricciones con el resto del mundo, sobre todo porque es una generación que pone todo en cuestión y que no está conforme con el orden establecido.
Importante saber que quienes componen la generación z fueron formando su personalidad de la mano de la tecnología e internet. La usan en su cotidianeidad (en su hogar, en su colegio, con sus amigos). Esto marca su personalidad. Adaptar un sistema educativo más antiguo a uno actual más interactivo, más retante para los alumnos, más participativo y colaborativo que logre motivarlos utilizando la tecnología e internet como medios de aprendizaje es verdaderamente significativo.
Es muy interesante éste material para comprender las necesidades de los estudiantes de la GENERACIÓN Z Y LA ACTUAL mucho más avanzada ya que los niños pequeños manejan los dispositivos táctiles de modo asombroso, generando un abismo con las prácticas educativas actuales. El Reto es para los docentes que deben aprender nuevas formas de vincularse con las TIC utilizándolas no sólo para su formación continua, también como una herramienta facilitadora en sus clases diarias, en ese espacio de construcción del conocimiento.
[…] La capacidad y la manera que tienen estos influencers de llegar a comunicar el conocimiento de un modo más atractivo y efectivo implica retos y cambia paradigmas educativos. Por ejemplo, las metodologías de Apple con el aprendizaje basado en retos (challenge-based learning) y otras como el aprendizaje activo (active learning) o las clases invertidas (flipped classrooms), que recomienda Iñaki Ortega, autor del libro Generación Z, y cuya entrevista reproducimos en este especial. […]