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Clausura de la primera temporada de vuestras #CharlasEducativas

Ingrid Mosquera
Profesora en UNIR, especialista en Didáctica, TIC y Microlearning activo
12 de junio de 2020
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Las #CharlasEducativas se llevan celebrando desde enero de este año. Su objetivo siempre ha estado claro, una doble vertiente: por un lado, dar voz a profesores con poca repercusión mediática que están haciendo cosas maravillosas entre las cuatro paredes de sus aulas y, por otro lado, dar la oportunidad de ver y escuchar a grandes docentes, ya consagrados, que, de otro modo,  muchos no tendríamos la oportunidad de escuchar, por limitaciones geográficas o temporales.

A mediados de marzo, cambió la situación y reforzamos las citas de los miércoles con charlas extra, talleres y charlas offline, debido a la situación sobrevenida y a la voluntad de ayudar a los docentes que pudiesen tener más dificultades a la hora de adaptarse a educar desde casa.

Este miércoles se cerraba esta primera etapa, a lo grande, con Cristian Olivé como invitado de honor.

LOS COMIENZOS Y EL BACKSTAGE

El camino para llegar a la primera charla no fue fácil, hubo que reflexionar sobre la mejor manera de poder retransmitir los directos de forma sencilla, tanto para los participantes como para los asistentes. La idea inicial era celebrar una o dos charlas al mes, pero dado el volumen de profesores interesados en participar, desde el comienzo vi oportuno celebrar una a la semana. Se plantearon varios horarios posibles, realicé una encuesta en Twitter, y escogí la hora preferida por los internautas, esto era: los miércoles a las 21.30. La duración inicial de las charlas era de 30 minutos: 15 minutos de presentación del invitado y 15 para plantearle las preguntas que hubiesen surgido en el chat en directo, en YouTube.

“Si no teníamos en cuenta esas preguntas, no tendría sentido hacerlo en directo”

Además de la presencia en YouTube y de la publicidad en Twitter, las charlas se vieron acompañadas de un Wakelet, una página especialmente creada para la ocasión en la que se recoge toda la información de las charlas, su funcionamiento, etc. Una página a la que se fueron añadiendo más posteriormente: una recogiendo opiniones sobre las charlas, otra con todas las publicaciones relacionadas que iban surgiendo, otra con las ilustraciones que David Gándara, un twittero, por propia iniciativa empezó a hacer para cada una de las charlas en forma de apuntes visuales, etc. También se creó un Genially con todo el calendario.

El trabajo que supone el proyecto es descomunal y continuo: contactar con los docentes, explicarles un poco el procedimiento, concretar fechas, pensar tema y título, preparar los carteles publicitarios, enseñárselos a los docentes para que les den el visto bueno final, darle publicidad en Twitter, añadir información al Wakelet y al Genially, programarlo en Youtube, hacer una prueba antes en la plataforma con los profesores, etc. Y eso todas las semanas, sin descansar ni una desde enero.

“La organización y planificación de las charlas supone un trabajo continuo”

Durante la retransmisión de la charla me ocupo de los aspectos técnicos y de ir recopilando todas las preguntas y comentarios que van surgiendo en el chat para planteárselo posteriormente al invitado. Según ha ido pasando el tiempo las charlas ha ido aumentando un poco su duración, con una media de 40 minutos en total. Con la excepción, por supuesto, de las charlas extra y los talleres que en muchas ocasiones contaban con varios profesores y han llegado a durar hasta dos horas.

CONECTANDO CON FUTUROS DOCENTES

Al mismo tiempo que se iban celebrando las charlas, muchos profesores hacían comentario del tipo “esto debería ser una formación obligatoria para todos los futuros docentes” o “Es lo mejor que ha salido en Educación en años”. De forma sistemática empecé a recomendar a mis alumnos de la Universidad, futuros docentes, asistir a las charlas, algo que les encantó, así que, vista la acogida y todos los comentarios que iba recibiendo, llegó el momento de hacerlas parte de mis clases.

Ahí surgió la parte final de mi proyecto, la que considero, sin duda alguna, como la guinda del pastel. En mis asignaturas de la universidad, Didáctica para futuros docentes, trabajo empleando una mezcla de gamificación y aprendizaje basado en retos. Los alumnos, colaborativamente, deben ir resolviendo challenges, retos, que les planteo en un foro, con un tiempo máximo, estando cada reto relacionado con unos temas determinados y con una herramienta digital concreta, para desarrollar su competencia digital.

Entonces, se me ocurrió que uno de esos retos debía estar relacionado con las charlas, para dárselas a conocer aún más. Así que, uno de los challenges consistió en escoger una charla, de todas las que se habían celebrado hasta ese momento, verla, y grabar un audio (usando la herramienta gratuita Vocaroo) que resumiese esa charla, de forma libre: lo que más les hubiese gustado, lo que menos, cómo creen que podrían aplicarlo ellos en el futuro, etc.

Les encantó la idea y tuve muy buena respuesta por su parte. Cuando me empezaron a llegar los audios les pedí permiso para compartirlos en Twitter y en Wakelet. Y lo primero que hice fue enviar, por mensaje privado, esos audios de los alumnos a los invitados de cada charla. Los profesores se emocionaron al escuchar a mis alumnos hablar tan bien de sus charlas. Así que les propuse enviarles un mensaje de vuelta para darles una sorpresa.

“El contacto directo de mis alumnos con algunos de los profesores invitados fue muy emocionante”

Los alumnos no se esperaban que esos profesores, a los que admiraban y que habían visto en mis charlas, se tomasen la molestia de contestarles. Fue una sorpresa que no puedo explicar con palabras. Emoción por todas partes. Todo el proyecto quedó subido a un Wakelet, además de publicarse en Twitter.

DIFUSIÓN DE LAS CHARLAS

La experiencia se está difundiendo en muchos medios:

“Algunos de los profesores invitados a las charlas han publicado sus reseñas en blogs y página web propias”

Solo me quedaba pendiente esta publicación, para hacer un repaso de todo lo que ha sido la primera temporada de las #CharlasEducativas y poder agradecer a todo el mundo su implicación.

LAS CIFRAS HABLAN POR SÍ SOLAS

En total, en la primera temporada, se han celebrado 31 #CharlasEducativas entre el 22 de enero y el 10 de junio. Y han participado como invitados 145 profesores (contando las charlas offline, 44 profesores sin contarlas).

“Más de 140 profesores han participado de forma directa en la primera temporada de las #CharlasEducativas”

La media de asistentes a las charlas ronda los 70/80 participantes en directo, comentando y realizando preguntas en el chat. Y hemos llegado a contar, en la charla de inclusión, con más de 350 profesores conectados en streaming durante casi dos horas. Un vídeo que ya cuenta con más de 5000 visualizaciones. Muchos de ellos pasan de las 2000 visualizaciones y pocos son los que bajan de las 1000.

CONTINUARÁ…

No nos olvidemos de que las #CharlasEducativas son un proyecto pequeño, fruto de un sueño que todos vosotros habéis hecho muy grande. Son la consecuencia del esfuerzo de los 145 docentes que habéis preparado con cariño vuestras intervenciones, de todos aquellos que las habéis compartido por redes y de todos los que, cada miércoles, sacrificáis un ratito de vuestro tiempo libre para reuniros con vuestro querido #claustrovirtual y reflexionar un poco, desde el sillón, sobre EDUCACIÓN. Hemos hecho Educación, hemos compartido Educación y hemos construido Educación.

Nos vemos en las #CharlasEducativas #SummerEdition.

Y si aún no tienes tu insignia de la primera temporada, consíguela aquí.

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