El modelo TikTok: un aprendizaje más inclusivo y autónomo

El abanico de oportunidades que ofrecen las redes sociales como TikTok es inmenso y sirve a los más jóvenes como fuente de conocimiento y al cuerpo docente como recurso facilitador de su labor.

El contexto actual sin duda ha beneficiado a la descarga de esta y demás aplicaciones digitales. Durante el confinamiento el uso de internet aumentó un 60% en los países de la OCDE, según un estudio elaborado por la propia organización. Crecimiento que desde la plataforma Qustodio han comprobado que se ha disparado entre los menores, cuya actividad online aumentó un 180% solo en la primera semana después del cierre de los colegios.

La realidad tal y como la conocíamos ha cambiado y también lo ha hecho el uso de las redes sociales. Según un artículo publicado por The New York Times, “el coronavirus terminó con el debate sobre el tiempo que pasamos delante de las pantallas. Y las pantallas ganaron”. Solo en Europa, TikTok registra más de 100 millones de usuarios.

Lejos de ser una aplicación solo pensada para realizar vídeos musicales, TikTok ofrece mucho más.

Durante el mes de junio, los museos más prestigiosos de Europa abrieron sus puertas a la gran plataforma de tal manera que usuarios de todas partes del mundo tuvieron la posibilidad de explorar las artes, las ciencias y la historia de una manera original y creativa a través del hashtag #MiMuseoEnCasa para celebrar la Semana de los Museos. Algunos de los centros que mostraron sus secretos de forma virtual fueron el Museo del Prado, el Museo de Ciencias Naturales de Berlín, Le Grand Palais de París o la Galería Uffizi en Florencia.

La oferta de vídeos tutoriales durante los meses de confinamiento también aumentó de manera exponencial. TikTok activó la campaña #EduTok, una campaña livestream con los mejores creadores y artistas de la plataforma para poder reforzar su relación con la comunidad compartiendo sus talentos y habilidades con ellos. Iniciativas como esta permiten a los usuarios aprender nuevos idiomas, reforzar sus habilidades matemáticas y aprender trucos para pintar, cocinar o cantar.

La última novedad que ofrece la aplicación, con el fin de conseguir un uso seguro por parte del público más vulnerable, es lo que se conoce como Portal Joven, espacio que ofrece herramientas, consejos y contenido educativos para que los menores dispongan de toda la información necesaria para disfrutar de la mejor experiencia posible.

El Portal ofrece consejos para mantener una cuenta segura, recursos relacionados con el control de comentarios e interacciones con otros usuarios, consejos sobre cómo actuar ante conductas inapropiadas dentro de la plataforma y la posibilidad de acceder al apartado Tú tienes el control con el que aprender trucos para diseñar el perfil de TikTok, configurar la privacidad o bloquear a un usuario.

Poder acceder a la tecnología es un elemento clave para empezar a disfrutar de las múltiples oportunidades que ofrece. El acceso no es igual para toda la población, no solo por la variable social, que pone de manifiesto la gravedad de la brecha digital, sino también por la falta de adaptación de las TIC a las personas con algún tipo de discapacidad.

Desde el Observatorio de Discapacidad Física indican que la mayoría de personas con discapacidad, el 63%,  utiliza las redes sociales. La más utilizada por este colectivo es Facebook con un 97%, seguida de Twitter con un 25% e Instagram que tan solo presenta un 16%. En el caso de Facebook, el 35% de las personas encuestadas señala encontrar muchas veces algún tipo de barrera, por ejemplo dificultades visuales o educativas, y el 33% hacerlo alguna vez.

Las redes sociales tienen un papel muy importante de inclusión de las personas con algún tipo de discapacidad en la vida social, pero el diseño y la accesibilidad a las mismas sigue siendo un reto pendiente de conseguir.

Los datos señalan que seis de cada diez personas con discapacidad tiene alguna red social y que la gran mayoría las utiliza con el fin de informarse sobre asuntos que les interesan. En menor medida, el 31% lo hace con el fin de compartir inquietudes y el 24%  para conocer gente con la misma discapacidad.

La accesibilidad universal y el diseño para todos sigue siendo, a día de hoy, un reto pendiente para poder garantizar el acceso a las TIC de todas las personas. La necesidad de adaptación para contribuir a la normalización de la vida de aquellos que sufren algún tipo de discapacidad es imprescindible, así como el desarrollo de herramientas que faciliten las actividades de la vida cotidiana de todas las personas sin excepción.

Las previsiones de futuro parecen indicar que la popularidad de TikTok seguirá creciendo y que cada vez será mayor la aplicación en el sistema educativo. Un crecimiento que debe hacerse con el compromiso y control de la sociedad para proteger a los más pequeños de los grandes riesgos de internet. “Si tenemos hijos digitales, tenemos que ser padres digitales”, afirma Eduardo Cruz, cofundador de Qustodio.

TikTok ha llegado para quedarse, así lo muestran los datos que indican que ya ha superado a Instagram como red favorita de los menores, que le dedican casi el mismo tiempo, 71 minutos, que a YouTube, 75 minutos. En febrero de 2020, en el top 3 de redes sociales más usadas por los menores, se encontraban Instagram, TikTok y Snapchat, seguidas de Facebook y Pinterest.

Tal vez la clave del triunfo se encuentre en las oportunidades de expresión y creatividad que  ofrece la aplicación que se multiplicaron durante los meses de confinamiento. Una forma de entretenimiento divertida, auténtica, agradable y muy diversa que permite a los usuarios aprender y abrir la mente a nuevas ideas.

Está claro que las formas de aprender de las próximas generaciones han sufrido una transformación sin precedentes. TikTok es mucho más que una aplicación. Las nuevas tecnologías presentan un nuevo modelo de aprendizaje más autónomo que no tiene que ser peor que el anterior, simplemente debe implantarse de forma segura, de tal manera que no presente amenazas y sirva a los más pequeños en su desarrollo.

En los últimos meses, han aparecido multitud de perfiles con un marcado matiz educativo, desde temáticas culturales o idiomáticas hasta docentes ‘tiktokers’ que enseñan sus asignaturas.  La situación de confinamiento ha aumentado la aparición de recursos, pero también el tiempo que los más pequeños pasan delante de las pantallas.

• Tiempo conectados.  En el último año, el tiempo que pasan los menores en redes sociales, ha aumentado en torno al 100%, llegando hasta un 200% durante los meses de confinamiento.
• Aplicaciones educativas. España es el país en el que más tiempo pasan al día los menores en plataformas educativas, con 15 minutos diarios durante el confinamiento siendo Google Classroom la más utilizada. Los niños españoles pasan menos tiempo jugando a videojuegos que en Estados Unidos y Reino Unido.
• Caída en verano. El tiempo en aplicaciones de Educación cayó un 31% durante el mes de julio y Google Classroom fue reemplazada por plataformas como Duolingo y Smartick. TikTok e Instagram se mantuvieron.
• YouTube. Los datos indican que siete de cada diez menores utilizan YouTube, se convierte así en el segundo medio más utilizado para ver vídeos después de Netflix. Los menores dedican casi el mismo tiempo a TikTok (71 min) que a YouTube (75 min).
• Medidas de prevención. Realizar descansos de las pantallas cada 45 minutos y apagarlas una hora antes de acostarse para evitar la luz azul, mejora la calidad del sueño y fomenta el conocido como bienestar digital  de las familias.