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¿Nos reímos juntos? Promover el sentido del humor positivo en el aula

Pax Dettoni, antropóloga, experta en Educación Emocional y creadora de “En Sus Zapatos”. Directora de la Asociación Teatro de Conciencia.
En Sus ZapatosViernes, 5 de noviembre de 2021
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Varios estudios científicos concluyen que reírse tiene multitud de beneficios para el cuerpo y la mente de las personas, así como para la convivencia.  Entonces ¿por qué no promover la risa, el sentido del humor positivo y saludable en las aulas?

La risa, el sentido del humor positivo, potencian la creatividad y el uso del pensamiento divergente: el mirar y entender las cosas de modo diferente y original.

Puede ocurrir que aparezca en el docente cierto miedo a la risa o al sentido del humor, pues se relaciona con las bromas pesadas o de mal gusto que algunos alumnos pueden hacer a otros compañeros o, también con el descontrol.  Y cabe decir, que esto no es lo que entendemos por sentido del humor positivo.

Si entendemos el sentido del humor positivo como la capacidad de presentar o comentar la realidad resaltando el lado cómico y risueño de las cosas, podemos entender también que desarrollarlo potenciará el optimismo y la habilidad para desdramatizar las situaciones cotidianas.  Ambas son cualidades para la sana autoestima de personas resilientes.  Por tanto, en nuestro compromiso de educar integralmente al alumnado, cabe por supuesto educarles también en un sentido del humor positivo.

Estarás dedicando tiempo a reír juntos; estarás creando un aprendizaje muy valioso para ellos como personas, y también como grupo.

Además, la risa, el sentido del humor positivo, potencian la creatividad y el uso del pensamiento divergente: el mirar y entender las cosas de modo diferente y original.

Con esta breve actividad podrás dar inicio a este proceso en tu aula, si quieres.

 10 MINUTOS PARA PROMOVER EL SENTIDO DEL HUMOR POSITIVO

Primeramente, se les pide a los alumnos y alumnas que, durante una semana, dediquen diez minutos al día para:

  1. Escribir las tres cosas más divertidas que han escuchado, visto o hecho en el día. Y también cómo les han hecho sentir.
  2. Escribir la razón de porqué estas cosas son divertidas, es decir ¿qué me hace gracia o me divierte de lo que ha pasado?

Para que este ejercicio sea efectivo, es importante que sea escrito. Por tanto, ‘’no vale’’ sólo pensarlo.

Para ayudar a tus alumnos con esta parte, puedes sugerirles:

  • Que den un título a lo que ha ocurrido (por ejemplo, ‘’bromear con mi padre sobre el sofá nuevo’’)
  • Que listen todas las cosas que les han parecido graciosas o risueñas, por pequeñas que sean (por ejemplo ‘’la sonrisa de mi madre esta mañana cuando me ha visto’’, ‘’la cara divertida de mi amiga al salir al patio’’)
  • Que describan las situaciones con detalle
  • Que hagan el ejercicio como parte de su rutina, por ejemplo, antes de irse a dormir.

Después, y pasada la semana, puedes abrir un espacio en la clase en el que puedan compartir con el resto de compañeros y compañeras su sentido del humor positivo.

Con esta actividad, y otras que se te ocurran, estarás dedicando tiempo a reír juntos; estarás creando un aprendizaje muy valioso para ellos como personas, y también como grupo.

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En la Asociación Teatro de Conciencia contamos con la Escuela de Educación Emocional con Teatro de Conciencia. En septiembre ha dado comienzo la segunda edición con el Curso de Educación Emocional con Teatro de Conciencia. Método “En Sus Zapatos”, en formato semipresencial, de 150 horas. Una formación del profesorado en educación emocional homologada con créditos del Ministerio de Educación y Formación Profesional del Gobierno de España.  Puedes informarte de próximas ediciones y de otros cursos cortos y conferencias educativas escribiendo a info@teatrodeconciencia.org. 

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