El dios del capitalismo y la ley de Educación
Con esta ley, un estudiante terminará la ESO sin saber lo que es el IPC y cómo afecta la inflación en sus vidas. © TOLGASEZ33
Y es que los profesores de Economía escuchamos casi diariamente este tipo de asociaciones entre nuestra materia y el capitalismo salvaje. –“¿Eres profesor de Economía? ¿Y qué enseñas, cómo ganar dinero? Pero nada más lejos de la realidad. Cualquier profesor de Economía podría explicar que la ciencia económica tan solo trata de ayudar a nuestros alumnos a entender de una manera objetiva el mundo en el que viven, para poder aprovechar sus recursos y no dejarse engañar. ¿Cuántas personas han sido “estafadas” al realizar una operación bancaria? ¿A cuántas personas les ha dado un “bocado fiscal” Hacienda al hacer la Declaración de la Renta? Con unos conocimientos básicos de tipos de interés e IRPF esa “estafa” y ese “bocado fiscal” no se habrían producido.
Según pasan por nuestras vidas las diferentes leyes educativas, parece cada vez más claro que nuestros alumnos, los futuros consumidores y miembros de la sociedad, tienen que tener competencias reales: saber aplicar en la vida real los conocimientos que han aprendido en la escuela. ¿Cómo podemos preparar a los futuros consumidores para enfrentarse a los todopoderosos bancos o a las grandes multinacionales? ¿Cómo podemos hacer que entiendan los riesgos que tiene una tarjeta de crédito o los derechos que se adquieren al contratar un seguro? ¿Cómo enseñar a las futuras generaciones que nada es gratis, y que sus impuestos financian todos los servicios públicos? ¿Cómo hacerles comprender que defraudar a Hacienda implica empeorar los hospitales, escuelas o carreteras?
Por tanto, parece lógico pensar que la nueva ley educativa que propone el Gobierno pone énfasis en que los futuros consumidores adquieran este tipo de conocimientos para ser menos vulnerables en un mundo cada vez más globalizado. Sin embargo, el peso de la Economía no solo no aumenta sino que desciende con el nuevo currículo educativo, dejando que los futuros consumidores aprendan a base de tortas en “la escuela de la vida”.
Con el borrador de reforma de la ley educativa (Lomloe) los estudiantes de secundaria ya no podrán cursar la asignatura optativa de Emprendimiento (IAEE) en 1º, 2º y 3º de ESO. Además, las materias de Economía y de emprendimiento de 4º de ESO, de tres horas semanales cada una, quedarán fusionadas en una única materia de tres horas. Es decir, actualmente un estudiante termina la Educación obligatoria pudiendo cursar todos los años una materia relacionada con la economía o el emprendimiento, y con la nueva ley tan solo podrá cursar la materia un año, en el que se le hace un remix de lo que actualmente se aprende durante cuatro años.
Con esta ley, un estudiante terminará la Educación Secundaria Obligatoria sin saber lo que es el IPC y cómo afecta la inflación en sus vidas. No tendrán un mínimo de conocimiento sobre el funcionamiento de la oferta y la demanda y no entenderán absolutamente nada de las decisiones que toma el Banco Central Europeo y lo importantes que son para su vida.
El conflicto político –o más bien fanatismo- parece que posiciona ciertos CONOCIMIENTOS como buenos o malos de antemano, según el lado del Parlamento desde el que se miren
Si analizamos la propuesta de currículo de Bachillerato también llama la atención que se pierda la asignatura optativa de 2º de Bachillerato de Fundamentos de Administración y Gestión de empresas porque ¿Para qué querrá un futuro emprendedor agrícola, ganadero, farmacéutico, abogado, odontólogo o emprendedor en general conocer los trámites para montar una empresa? Crisis económica tras crisis económica, el gobierno de turno nos habla sobre las bondades del espíritu emprendedor y lo importante que son las pequeñas empresas para el país, pero si se eliminan estas asignaturas optativas del instituto los futuros emprendedores lo tendrán más difícil para dar sus primeros pasos.
Por otro lado, el informe PISA nos indica que con la carga horaria actual en el instituto, la competencia financiera de nuestros jóvenes está por debajo de la media de los países de la OCDE. Esto nos lleva a preguntarnos a los profesores de Economía el motivo que puede llevar a nuestros gobernantes a reducir la carga horaria, y es entonces cuando reaparece el fantasma del dios del capitalismo.
El conflicto político –o más bien fanatismo– parece que posiciona ciertos CONOCIMIENTOS como buenos o malos de antemano, según el lado del Parlamento desde el que se miren. Pero el conocimiento es poder y cuando se le niega este tipo de conocimientos al consumidor se le hace más vulnerable, lo que me lleva a preguntarme… ¿Quiénes son los auténticos interesados en un consumidor dócil?
El problema se origina porque para muchos sectores de la sociedad la economía está asociada a los ricos, poderosos y al capitalismo en general. Pero es que es precisamente esta lejanía entre los conocimientos del ciudadano medio y la ciencia económica lo que hace que esta conexión esté establecida en la cultura popular. Porque la economía parte de hechos objetivos para intentar explicar la realidad social. Es una herramienta que se puede usar en el terreno político para hacer una reforma laboral, para subir el salario mínimo o para ampliar los ERTE. Pero la intención con la que se debe o se tiene que usar esa herramienta es algo que no forma parte de la economía. Porque ahí, en la política, los profesores de Economía no queremos ni podemos entrar.
Con la nueva propuesta de ley educativa vamos a dejar a los futuros adultos sin el escudo económico que estaban empezando a tener, volviendo a dejar la economía en manos de unos pocos ¿Estamos a tiempo de corregir la situación?
Juan José Peña Moles es profesor de Economía en el IES «Pablo Ruiz Picasso» de El Ejido (Almería) y miembro de AADES
No puedo estar más de acuerdo. Los niños que terminan la ESO ya no sabrán de donde sale el dinero que se usa para las pensiones, los hospitales, colegios etc. Todos a vivir en un mundo feliz lleno de ignorancia y fanatismo.
Me parece increíble que se vayan a eliminar esos conceptos del instituto. Ojalá hubiera tenido la oportunidad de estudiar en mis tiempos como hacer la declaración de la renta y cosas de ese estilo
[…] Artículo que publiqué el pasado mes de noviembre en el periódico Magisterio […]
[…] Granada Hoy con una temática muy parecida a lo que publiqué hace un año en el periódico Magisterio “El Dios del capitalismo y la ley de educación”: La importancia de estudiar economía […]