Los rectores agradecen a Castells su labor, pese a posiciones discrepantes
En un escueto comunicado, los rectores han agradecido su trabajo, en especial la «colaboración mantenida con todo su equipo durante la difícil situación vivida en esta pandemia. Gracias a la aportación de todos se evitó el colapso del curso en los meses más duros de la crisis sanitaria».
La relación de CRUE con el ministro ha sido «sumamente intensa» y se han abordado temas de «gran importancia» para el sistema universitario, como la modificación del sistema de becas, los reales decretos de ordenación de las enseñanzas y de acreditación, la Ley de convivencia o el anteproyecto de Ley Orgánica del Sistema Universitario. Con el ministro «hemos compartido el objetivo de mejorar la Universidad, aunque las visiones han sido en ocasiones discrepantes. Pero hoy, desde Crue se quiere agradecer a Manuel Castells su sincera y honesta labor», concluye el comunicado.
Por su parte, el sindicato CSIF ha reclamado al nuevo ministro de Universidades, el catedrático jubilado de Ciencias Políticas de la UAB Joan Subirats, que aplique una política con visión estatal al margen de las presiones independentistas. La Confederación, que lamenta que Castells «haya perdido la oportunidad de impulsar la reforma universitaria por una visión equivocada de la política condicionada por los socios independentistas del Gobierno», ha demandado también el desarrollo del Estatuto del Personal Docente e Investigador.
Desde el terreno político, el PP y Ciudadanos han pedido al Gobierno que aproveche la dimisión de Castells para suprimir el Ministerio de Universidades. «Es el Ministerio de Universidades el que debe eliminarse», ha escrito en su cuenta de Twitter la diputada popular, María Jesús Moro, que cree que «ni el momento económico de España ni la adecuada gestión de ciencia y universidades justifican dos ministerios.
En la misma red social, la responsable de Ciudadanos, Inés Arrimadas, ha manifestado que «lo mejor que podría hacer Pedro Sánchez es no nombrar sustituto para Manuel Castells. Que las competencias de Universidades las asuma Educación (para mejorar la calidad del sistema y no para empeorarla desde el sectarismo) y los españoles nos ahorremos el coste de un Ministerio».
El ministro de Universidades, Manuel Castells comunicó hace unos días su renuncia al cargo al jefe del Gobierno, Pedro Sánchez, y a la vicepresidenta Yolanda Díaz, una decisión «reposada» que adoptó por prescripción médica y en estrecha colaboración con su familia, según fuentes de esta cartera.
Entre los avances conseguidos en los dos años de mandato de Castells, de 79 años, las mismas fuentes mencionan la ampliación de las becas universitarias y la reducción de las tasas, eliminando el sistema de horquillas establecido por el exministro José Ignacio Wert, equiparando los precios de los másteres habilitantes a los de grado.
También sacó adelante el real decreto de creación de universidades y proyectó una reforma universitaria que, según estas fuentes, «sin duda» seguirá su camino en manos del nuevo ministro, Joan Subirats. Y es que han quedado pendientes sus dos proyectos más ambiciosos: el citado anteproyecto de reforma universitaria y la ley de convivencia universitaria, todavía en tramitación parlamentaria. Ambos han provocado la contestación de buena parte de la comunidad académica, los sindicatos y la oposición política.