Cómo ha cambiado la educación en idiomas
Este contexto ha hecho que la manera en la que se aprenden nuevos idiomas también haya cambiado. Hasta hace no mucho, el método empleado se basaba en la gramática-traducción, que consiste en aprender reglas gramaticales y vocabulario de memoria. Este modelo iba asociado a un programa cerrado e igual para todos los alumnos. De este modo, muchos alumnos adoptaron, erróneamente, la concepción de que no se le daban bien los idiomas.
Hoy en día optamos por otros sistemas en los que la práctica hablada tiene un peso mucho mayor. En nuestro caso, desde British School of Valencia llevamos haciendo esto desde nuestros inicios en 1992. Al ser un colegio que basa su currículo en el modelo educativo británico, nuestra tarea docente y formativa refuerza los vínculos entre la cultura española y la inglesa ofreciendo una inmersión completa en la cultura británica desde los cursos de Educación Infantil puesto que los alumnos se empapan del inglés a lo largo de toda la jornada escolar. De este modo, el aprendizaje es similar al de la lengua materna, lo que facilita en gran medida su asimilación.
Hay que destacar el papel de la tecnología en el aprendizaje de nuevos idiomas. Internet, el desarrollo de aplicaciones móviles e incluso la Inteligencia Artificial como la plataforma de Century Tech
También hay que destacar el papel de la tecnología en el aprendizaje de nuevos idiomas. Internet, el desarrollo de aplicaciones móviles e incluso la Inteligencia Artificial como la plataforma de Century Tech que empleamos en BSV, se han convertido en grandes aliados también a la hora de aprender una nueva lengua. El uso de aplicaciones o programas de enseñanza de idiomas permiten practicar el idioma teniendo un feedback prácticamente inmediato y llevar un control exhaustivo de la evolución del estudiante. La tecnología también facilita el trabajo para los docentes, pudiéndose apoyar en ella para transmitir mejor el contenido, de una manera más práctica, además de posibilitar que ciertas actividades se puedan continuar trabajando o repasando desde casa.
La sociedad evoluciona a ritmos vertiginosos y el sector educativo debe adaptarse a las nuevas circunstancias. Para ello, no podemos dejar de lado la tecnología. Debemos aprovechar todas las posibilidades que nos ofrece para que los alumnos salgan lo mejor preparados y formados a los nuevos entornos laborales. En este camino, los idiomas no deben quedarse en un segundo plano ya que, hoy más que nunca, forman parte de nuestra realidad actual y serán completamente imprescindibles para las sociedades venideras.