Crean una plataforma para estimular la comunicación en adolescentes con autismo

Muchos de los avances científicos, tecnológicos, culturales y sociales han sido y son liderados por personas con alguna condición del espectro autista, desde Isaac Newton, Albert Einstein o Charles Darwin hasta Steven Spielberg, Woody Allen, Bill Gates o Greta Thunberg. Su modo distinto de ver y entender el mundo puede contribuir significativamente a la sociedad. Sin embargo, también puede suponerles importantes problemas de adaptación.

Usando una metáfora, las personas con autismo «viven en un mundo que funciona mayoritariamente con el sistema operativo Windows, pero ellos usan macOS, lo que les genera dificultades de compatibilidad continuamente», apunta el psicólogo clínico Àlex Escolà, profesor colaborador de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC).

Para ayudar a este colectivo, que se estima que engloba un 1% de la población, a poder navegar mejor en un mundo dominado por personas neurotípicas, así como para ayudarlos a mejorar su calidad de vida, su bienestar y su adaptación funcional, Escolà, junto con el equipo de psicólogos del Instituto de Diagnóstico y Atención Psiquiátrica y Psicológica de Barcelona, ha creado una plataforma web de vídeos interactivos en continuo llamada AutisMIND Vídeos, destinada a estimular la comunicación y la cognición social de adolescentes y adultos con autismo. El objetivo es que el usuario tome decisiones durante la reproducción de los vídeos y elija cómo sigue la historia, cómo se resuelve un problema o qué desenlace tiene una situación.

«La idea es parecida a un tipo de libros que se popularizaron en los años 80 y 90 en los que tenías que elegir tu propia aventura», explica Escolà, que imparte docencia en el máster universitario de Psicología Infantil y Juvenil. «Hemos grabado situaciones cotidianas, como una visita al médico, una entrevista de trabajo o una cita, y, en cada momento, la persona puede ir tomando decisiones que determinan cómo sigue la historia», añade.

De momento, ya ha habido 300 usuarios que han probado esta plataforma, y han constatado que es motivadora y que funciona como una herramienta terapéutica muy potente que les permite aprender a anticipar situaciones, practicar posibles soluciones y ver las consecuencias de cada acción. «Adquieren recursos para la vida real», resume Escolà.

Este proyecto coge el relevo de AutisMIND, una aplicación móvil lanzada en 2017 por Escolà y dirigida a un público infantil. En esa primera iniciativa tecnológica, lo que se pretendía era ayudar a niños pequeños con autismo a ponerse en el lugar de los demás para poder hacer inferencias sobre su comportamiento. La aplicación ya lleva más de 35.000 descargas.

En esta segunda iniciativa también participan adolescentes y jóvenes con autismo que asesoran a los profesionales sobre los guiones de los vídeos. «Desde el diseño y la creación de la plataforma, nos guían con su forma de ver el mundo o desde su propia experiencia», afirma Escolà, que concluye que «la neurodiversidad y la inclusión son posibles y benefician a todo el mundo».