Eureka
La última novedad que hemos introducido en nuestro día a día es el taller de “Eureka” (cuyo significado es descubrimiento) para nuestros niños de 2-3 años.
Este taller pretende dar continuidad al juego heurístico realizado en el nivel 1-2 años.
Para llevar a cabo el taller son precisas una serie de habilidades motrices a nivel fino. Por ello, los materiales empleados en esta actividad son más complejos que los del juego heurístico.
Esta actividad pretende la adquisición de conocimiento mediante la manipulación de objetos y la relación entre ellos (pensamiento lógico-matemático).
Las sesiones se distribuyen de la siguiente forma:
• Motivación. En este primer momento, en la asamblea, se explica la actividad que se va a realizar, recordándoles las normas del taller.
• Preparación del espacio. Los niños se sientan en las mesas y el educador se encarga de dar una bandeja a cada niño con el contenido correspondiente. Posteriormente, se empiezan a sacar los materiales de trabajo (coladores, tapones, botes, cucharas, lupas…), colocándose en el centro de la mesa para que todos puedan acceder con facilidad y puedan decidir qué elemento utilizar..
• Trabajo exploratorio. Los niños comienzan a actuar (a modo de ejemplo de sesión, manipulan piedras, agua y harina), a explorar de manera libre, empleando los materiales que tiene a su alcance y que van seleccionando.
• Recogida y limpieza del material. Los niños se encargan de colaborar en la limpieza del material utilizado y que recogerán clasificándolo.
• Verbalización de la actividad. En esta última fase, tras la recogida completa del material, se establece en el rincón de asamblea un diálogo, explicando lo que se ha hecho, los materiales que se han utilizado, las masas que se han tocado y las acciones que se han realizado.
La actividad surge por la necesidad de dar continuidad al Cesto de los Tesoros y al Juego Heurístico.
Las sesiones favorecen la capacidad de concentración, de experimentar con objetos, conocer sus características, formas y texturas; relacionar unos objetos con otros; el cambio de las características de algunos materiales…
El objetivo primordial es que el niño aprenda por sí solo, que observe, explore y manipule y consiga su aprendizaje sin necesidad de depender del adulto. Esta actividad le ayuda a estructurar el pensamiento a su propio ritmo. Disfruta con la sorpresa de descubrir cosas.
Creemos que es una actividad que motiva a los niños y que les enriquece.
Valoramos este proyecto de forma muy positiva, puesto que hemos aprendido a observar a nuestros pequeños y recordar que, en las pequeñas acciones, se encuentra el verdadero aprendizaje.
MÓNICA LLORENTE, LAURA FERNÁNDEZ Y BEATRIZ ALMENDROS
EI “Los Abetos, Parla, Madrid