Doble vía hacia el sueño
Hace un par de meses abordamos los problemas
de insomnio en la infancia desde una
óptica farmacológica. En esta ocasión os presentamos
dos remedios naturales contra la
falta de sueño: Estivill vs. Jové.
Autor: ANA MUGUERZA
Estivill: deben dormir solos en su cama
– El archiconocido Duérmete niño (Plaza & Janés) de Eduard Estivill se ha convertido en manual de cabecera imprescindible para muchos padres desesperados tras muchas noches en vela. Está basado en las teorías de la psicología conductual y básicamente consiste en “aplicar unas normas y rutinas de sentido común para que el niño sea capaz de dormir sin problemas en su habitación y su cama”, según explican desde el equipo de Estivill en el Instituto Dexeus de Barcelona. Los padres dejan a sus hijos en la cuna y no los levantan aunque lloren. Se establece un sistema de tiempos para visitar y consolar a los pequeños, pero en ningún caso se les coge en brazos.
– Según el doctor Estivill, el 35% de los niños menores de cinco años tiene problemas para lograr caer en los brazos de Morfeo. Esto tiene consecuencias no sólo en los pequeños –se vuelven irritables e inseguros– sino que también afecta a la salud de toda la familia. En su libro, Estivill promete acabar de una vez por todas con el problema del insomnio infantil y presume de que su método ha funcionado en el 96% de los casos en lo que se ha aplicado.
– El método Estivill no se salva de las críticas, y su aspecto más polémico es el hecho de que haya que dejar llorar al niño. Los seguidores de esta técnica aseguran que no se trata de abandonar al niño a su suerte. “Dejarle llorar toda la noche para que se duerman es una crueldad”, aseguran. En el libro se explica que hay que entrar en la habitación del pequeño para visitarle y tranquilizarle “tantas veces como sea necesario” para que no se angustie y entienda cuál es la situación. En cuanto a las críticas por las supuestas secuelas emocionales que este método pudiera generar en los pequeños, desde el equipo de Estivill se asegura que “no se ajustan a criterios científicos”.
– Duérmete niño se ha traducido a 18 idiomas y ha vendido más de un millón y medio de ejemplares.
Jové: dejar llorar al niño no es la solución.
– No es necesario adiestrar a los pequeños para que aprendan a dormir “ya que todos los niños sanos van a dormir correctamente algún día entre los cero y los cinco años, sin necesidad de hacer nada”, apunta Rosa Jové. Esta especialista en psicología clínica infantil y juvenil, autora de Dormir sin lágrimas (La Esfera de los libros), mantiene que el sueño es un proceso evolutivo y que no hay que alterarlo ya que “como necesidad vital se sincronizará con nuestras necesidades en cada momento de nuestra vida”
– Según un estudio que cita Jové, el 81% de los niños de un año se despierta por la noche. A los dos años de edad, este porcentaje se reduce al 54%.
– Para la psicopediatra catalana, dejar llorar a los niños no es la solución . “No se trata de aplicar un método o unas normas de disciplinas –no hay un método igual para todos– sino de abordar cada caso con afecto y comprensión”, comenta. Jové destaca el papel de la lactancia materna en el éxito del sueño y se muestra partidaria del colecho (que el niño comparta cama con sus progenitores) porque “a los pequeños les gusta dormir con sus padres y así acaban durmiendo más horas seguidas”.
– Rosa Jové no ahorra críticas al popular método Estivill. “Las técnicas de adiestramiento basadas en dejar llorar a los niños son crueles e inhumamas”, asegura. Según esta especialista en sueño infantil, cuando un bebe llora es porque le pasa algo y no se puede dejar desatendidos a los niños cuando más lo necesitan. “No se enseña a los niños a dormir, sino a no quejarse cuando se despiertan”, apunta. Además, estos métodos tan estrictos pueden generar secuelas importantes en los pequeños como trastornos de ansiedad, depresiones, indefensión aprendida o síndrome de estrés postraumático.
– En sólo año y medio, Rosa Jové ha vendido más de 40.000 ejemplares de su libro Dormir sin lágrimas. El año que viene se traducirá al inglés.