¿Cómo puede el alumnado mantener la concentración aprendiendo desde casa?
La crisis sanitaria derivada de la Covid-19 nos ha puesto en un inusual escenario en el ámbito de la educación. Tenemos el desafío de adaptarnos a las reglas cambiantes y desarrollar nuevos hábitos en la escuela, buscando nuevas normas de enseñar o aprender en remoto. Esta situación ha hecho que muchos centros educativos implanten en sus aulas el llamado ‘modelo híbrido’, que combina clases presenciales con clases online. La educación online es todo un reto para las familias, el equipo docente y alumnado, y en muchas ocasiones complica el cumplimiento de los horarios y las tareas asignadas. No es fácil convertir el salón de nuestra casa en un aula, pero sí es importante seguir unas pautas y consejos para motivar y afianzar la enseñanza del alumnado. Wacom aporta algunas recomendaciones para enfrentar el curso desde casa:
Establecer un horario
Antes de empezar las clases es importante establecer los horarios de cada día, tal y como sucede en sus aulas. Los estudiantes necesitan una rutina para levantarse y acostarse a la misma hora. Por eso, hace falta revisar el horario de actividades y definir las horas de estudio frente a las horas de descanso. Incluso hay quienes han descargado un sonido de timbre para que los alumnos se sientan vinculados al colegio.
Crear un lugar de estudio
Romper la rutina y cambiar la presencialidad por la conexión virtual con la clase puede hacer que muchos alumnos se sientan desorientados, y que, como consecuencia, su nivel de concentración disminuya notablemente. Es importante delimitar un espacio dentro del hogar donde los estudiantes puedan a hacer sus tareas y atender las clases online. Este debe ser un lugar silencioso y ordenado, completamente despejado de objetos de ocio que dificulten la concentración. Asimismo, vestirse también puede ayudar a conseguir un estado de ánimo auténtico como el de acudir presencialmente a clase.
Incorpora herramientas digitales a las ‘clases virtuales’
Tener las herramientas correctas hacen que el alumnado sea más receptivo al aprendizaje a distancia. La pantalla interactiva Wacom One es una buena opción para seguir las clases, tomar apuntes o dibujar fórmulas y gráficos. Su diseño compacto, con soporte regulable, y su fácil instalación permitirán adaptarse a la mejor posición para cada estudiante, y así brindar una mejor concentración durante las horas de clase o estudio.
Las pantallas interactivas o pizarras digitales permiten a los estudiantes anotar, hacer presentaciones o mapas conceptuales gracias a la precisión del lápiz digital, que se adapta a la escritura como si lo hiciese sobre una hoja de papel. Estas herramientas son especialmente útiles para los alumnos que tienen deberes que deben escribir a mano y después entregar al profesor, ya que se guardan directamente en el ordenador para poder ser enviados, evitando que los alumnos tengan que ir al colegio solo para entregar los documentos. También es una excelente opción para los estudiantes que tienen muchas tareas de matemáticas o que desean continuar desarrollando su lado más creativo a través del dibujo.
Establecer reuniones periódicas con los profesores
Con la enseñanza a distancia perdemos el contacto directo con los profesores. Por ese motivo, es importante establecer reuniones de forma periódica y mantener una relación fluida con el profesor y la clase. Estos encuentros servirán para hablar sobre los desafíos del alumno, revisar las siguientes lecciones, hacer videoconferencias y entender qué espera el equipo docente del alumnado mientras están en casa. Skype y Microsoft Teams son excelentes plataformas para conectar profesores y estudiantes, pues ofrecen chats grupales, pantalla compartida y videoconferencias para una clase interactiva entre profesor y alumnos. Asimismo, las reuniones online pueden apoyarse en herramientas que favorecen la interacción, como los monitores interactivos con lápiz digital, que permiten duplicar la pantalla de los ordenadores para seguir la clase y realizar a la vez anotaciones sobre el monitor, como si fueran papel y boli.
Lo más interesante de todas estas plataformas colaborativas es que se ejecutan en la mayoría de los sistemas operativos (incluidos Windows, MacOS, Android). Lo mismo sucede con los monitores digitales como Wacom One, que es compatible con los sistemas operativos Windows, MacOs y la mayoría de Android, por lo que ni alumnos ni profesores tendrán que cambiar de ordenador para comenzar a usarla.
La situación que estamos viviendo va a determinar el futuro de la educación, donde la tecnología se incorporará en las escuelas para ser la gran aliada en la enseñanza, y donde los métodos de aprendizaje híbridos serán una nueva solución de aprendizaje. En definitiva, la educación del futuro pasa por una inversión en infraestructura digital, la revitalización del aprendizaje continuo, y la modernización de los planes de estudios de los centros educativos. De esta manera, nos aseguraremos de que los alumnos aprendan online manteniendo la concentración y la interacción propia de las clases físicas.