Juegos que fomentan el aprendizaje de robótica en el aula

La tecnología y programación se deberían enfocar de una manera más práctica. Lo que te vamos a proponer son distintos recursos experimentales con los que llevarás la asignatura a otro nivel. Procura temporalizarlos en una semana, con dos o tres sesiones en total para que lleven a cabo todo el proceso.

1. Crear una abeja robótica con Bee-Bot

Esta primera opción les permitirá crear y programar una abeja con el software Bee-Bot. Primero, muéstrales sus características principales, funcionamiento y modo de uso. Corrobora que saben usar el programa y plantéales una temática, basada en diseñar este insecto y hacerlo autónomo.

Durante el proceso, haz que usen materiales como el papel, el cartón o la plastilina. Incluso está en su mano añadir detalles a su imaginación, como alas, antenas, ojos y rayas amarillas y negras. Luego, deben programarla para que se mueva (nuestro consejo es que descargues la hoja de instrucciones del fabricante, donde están los pasos).

Posteriormente, hay distintas vías para continuar con la dinámica:

• Creación de desafíos, como caminos con obstáculos que la abeja debe superar.
• Laberintos que puede atravesar para llegar a una meta imaginaria.

Cuando llegue este punto, deberán hacer una presentación final. Pídeles que muestren sus creaciones también en el sentido estético, lo que te servirá para que no descuiden el acabado. Esta parte es fundamental para su aprendizaje, sin duda alguna.

2. Fabricación de un robot constructor

Lego Mindstorms es un conjunto de sistemas fáciles de programar. Está formado por un paquete de elementos básicos, junto con un software que debes descargar para controlarlos. Igual que en el caso anterior, deben tener acceso a un ordenador por persona. Eso sí, como este es algo más complejo (no tanto, en verdad), pueden hacerlo en grupos.

Muéstrales de modo detallado las instrucciones del kit, con su manual de instrucciones y cada pieza. Estas les resultarán familiares, dado que siguen la estética de los mismos juguetes de montar. Con el programa, tendrán que controlarlo para que realice funciones, de modo que parezca un robot autónomo de verdad.

Una vez que hayan construido y programado con éxito el robot constructor, puedes lanzar desafíos que les resulten entretenidos. Por ejemplo, invítales a construir una torre o un puente utilizando piezas de Lego. Estas las deberían traer incluso desde casa para que se sientan más próximos a los juegos con los que tienen más contacto habitualmente.

3. Microprogramación con Sphero Mini

Next 2.0 es un robot fácil de programar para los niños, con un funcionamiento muy simple que minimiza la introduccion de códigos. Resulta imprescindible que les expliques cómo se efectúa el movimiento en este caso y que cada alumno tenga acceso a un ordenador. Puedes adquirir el programa de manera gratuita desde la web oficial.

Luego, deben conectar el minirobot a través de un cable USB al ordenador en el que han instalado el sistema. Con este, tendrán que realizar la programación para que se mueva y lleve a cabo tareas preliminares. Explícales que cuenta con un lenguaje de programación visual, lo que significa que les será más fácil.

Hay distintos desafíos y actividades que puedes llevar a cabo con ellos. Por ejemplo, una carrera en la que el minirobot deba esquivar obstáculos o un juego en el que deba recolectar objetos. Haz que presenten el resultado final para valorar también el criterio estético, sobre todo, el acabado y los detalles.

4. Carreras con coches robóticos

Los coches robóticos son una opción estupenda que no podíamos dejar de presentarte. Con el kit Lego WeDo, tienen la posibilidad de programarlos para que hagan emocionantes carreras. De nuevo, explícales cómo funciona este recurso y haz que lean el manual de instrucciones. Como es más compleja, esta actividad la puedes temporalizar en dos semanas (las anteriores en una).

Con el software que deben descargar en el ordenador, solo tienen que pedirle al coche (conectado previamente) que se mueva. Hay distintas acciones que, por medio de recursos visuales, pueden ordenarle. Nuestro consejo es que dejes que ellos mismos descubran lo que son capaces de hacer para que sorprendan.

Por último, sería ideal que mantuvieran una carrera para ver cuál puede correr más. Intenta diseñar una especie de pista, que puede ser improvisada en el suelo. Esto es clave para que entiendan la utilidad práctica de sus construcciones.

Hasta aquí has podido ver los mejores juegos para las clases de robótica con tus alumnos. Estos recursos son una apuesta fundamental por su desarrollo en el aula, con dinámicas que ellos mismos pueden liderar, tanto de manera individual como en grupo. La experimentación es clave para que comprendan cómo las tecnologías resuelven problemas.

¿Hay otro juego que hayas usado en la clase de robótica? ¡Deja tu comentario y lo veremos todos!