Nos expresamos con música

El proyecto “Aprendiendo con la música” empezó el curso 2016-17, cuando los alumnos eran bebes. De hecho, este grupo, exceptuando este año, han compartido dos edades diferentes en la misma aula, lo que hace que los niños y niñas aprendan de los mayores y viceversa. El proyecto tendrá una duración de tres años.

Con este proyecto, pretendemos que los niños aprendan a conocer su cuerpo, a desarrollar sus posibilidades motrices y a expresar sus sentimientos (alegrías, tristezas, miedos…) a través de la música. Esta unidad es interdisciplinar, ya que intervienen la mayoría de las áreas. Acabaremos el proyecto grabando unas sesiones para que quede plasmado todo lo aprendido a lo largo de los años. Lo haremos bajo el título “Nos expresamos con la música”.

Artistas orgullosos y felices

El proyecto se empezó en el 2016 con el grupo mixto de cinco niños y tres niñas de 0-1 y 1-2, por eso el grupo ha ido variando a lo largo de los cursos.

En nuestra escuela, damos mucha importancia a la música y, de hecho, es el hilo conductor de nuestras propuestas. Hemos visto crecer a estos niños y niñas con la música: cómo se movían en las gandulas o en el suelo, empezar a dar sus primeros y acabar haciendo pequeñas coreografías.

Aunque la música, como ya hemos comentado, es el hilo conductor de las propuestas, siempre procuramos tener un momento para hacer una escucha activa de esta.

Las sesiones se hacen una vez a la semana y se dividen en varias fases, según la música:

• Entrada
• Concentración y juego
• Movimiento
• Música sonoro musical
• Audición activa
• Relajación.

En ellas, hemos aprendido dónde tenemos las orejas, la boca, la nariz, las manos… Aprendemos a mover la lengua y los labios de maneras diferentes (ayudando así al lenguaje), a ir rápido y lento, a seguir ritmos sencillos y a hacer pequeñas coreografías, así como a ir perfeccionándose en el descubrimiento de los instrumentos y empezar a tocarlos (a veces no es tan fácil como parece en un primer momento).

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Objetivos

Conocer y representar su cuerpo, sus elementos y algunas de sus funciones.

Descubrir las posibilidades de acción y expresión. Coordinar y controlar, con gestos y movimientos cada vez más precisos.

Identificar sus propios sentimientos, emociones, necesidades o preferencias, y ser capaces de denominarlos, expresarlos y comunicarlos a los demás, identificando y respetando, también, los de los otros.

Realizar, de manera más autónoma, actividades habituales y tareas sencillas para resolver problemas cotidianos, aumentando la autoconfianza.

Despertar en el niño la curiosidad por su entorno sonoro, a la vez que se inicia una aproximación del timbre.

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Con la música hemos aprendido de dónde venimos con la canción “Unga balunga” y “Somos trogloditas”; hemos descubierto todo nuestro cuerpo y las posibilidades que tenemos, que no son pocas, y hemos tenido una ayuda para superar nuestros miedos.

Ha sido un proyecto muy enriquecedor y, para años posteriores, hemos de intentar fotografiar más sesiones de música, aunque a veces es complicado.
Ha sido un proyecto muy gratificante puesto que se puede ir viendo cómo van creciendo y progresando, alcanzando sus metas y superando barreras con ayuda de la música.

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MONTSE HUMANES ANGLÈS Y REMEI MONGE FÀBREGAS
Escola Bressol Sagrada Família Caldetes