Madrid quiere poner en marcha un sello para Infantil y Primaria sin pantallas

La Comunidad de Madrid quiere poner en marcha «un sello para Educación Infantil y Primaria sin pantallas», de manera que aquellos centros que lo deseen puedan en su plan docente mantener una infancia libre de pantallas, reforzando la libertad de elección de las familias en esos años clave para los alumnos.

En un desayuno informativo organizado por Nueva Economía Fórum, el consejero de Educación, Ciencia y Universidades, Emilio Viciana, ha anunciado esta medida para reforzar la prohibición del uso de los móviles en el ámbito de educación dentro del plan para una educación libre plural y de calidad que el Gobierno de la Comunidad de Madrid presentará en enero.

El consejero ha recordado que desde el curso 2020-21 en la Comunidad de Madrid está prohibido el uso de dispositivos móviles durante la jornada escolar, no solo en las aulas, sino también en los recreos en las zonas comunes, una vez detectadas las consecuencias derivadas de su uso inapropiado.

El pasado miércoles, la ministra de Educación, Pilar Alegría, propuso a las comunidades autónomas restringir el uso del teléfono móvil en los centros educativos, tanto de Primaria como de Secundaria.

Para Viciana, el anuncio de la ministra pretendía «atajar el enorme problema derivado de la cotización de las prácticas de Formación Profesional a la Seguridad Social«.

Dentro del plan para una educación libre plural y de calidad, ha explicado el consejero, el Gobierno regional quiere introducir medidas orientadas a reforzar esta prohibición de los móviles y los posibles problemas a los que ello puede dar lugar, como la puesta en marcha de «un sello para Infantil y Primaria sin pantallas».

El uso «desmesurado» de dispositivos móviles incide «en el ámbito educativo, social y sanitario» y puede dar lugar a soledad, a depresión y a una distorsión de la realidad, además de dificultar las relaciones sociales, ha indicado Viciana.

Además, ha señalado la facilidad con la que los menores se saltan las barreras de control parental y acceden a contenidos pornográficos, de carácter violento o drogas o reciben proposiciones deshonestas.

«Cuando éramos pequeños los niños estaban en la calle, corriendo y saltando, mientras que ahora están permanentemente mirando el móvil, se relacionan a través de un chat o de un videojuego y les cuesta mucho relacionarse físicamente con otros niños de su edad», ha agregado.