Abierto el proceso para culminar la educación gratuita de 0 a 3 años en Castilla y León
De este modo, las escuelas infantiles municipales, y las privadas, tienen hasta finales de mes para comunicar a la Consejería de Educación el número de unidades que desean aportar al sistema, en un curso que incorporará las aulas de los niños de 0 a 1 año, tras la anterior incorporación a la gratuidad de los alumnos entre 1 y 3 años. Las unidades de 1º (de 0 a 1 año) serán de 8 alumnos, las de 2º (de 1 a 2 años) contarán con 13 niños como máximo y las de 3º (de 2 a 3 años) podrán albergar hasta 20 menores.
En este curso académico 2023-24, la Junta de Castilla y León ha ofrecido educación gratuita a casi 16.000 niños de entre 1 y 3 años y las familias han podido elegir entre 624 centros –356 de públicos y 268 privados–.
La Junta de Castilla y León ha desautorizado la decisión del Instituto público de Educación Secundaria León Felipe de Benavente (Zamora) de recomendar a los profesores, alumnos y el personal de administración el uso voluntario de mascarilla en el centro ante la elevada tasa de incidencia de las enfermedades respiratoriass.
Tras efectuar esa recomendación ayer martes la dirección del centro y ofrecer además mascarillas para quienes quisieran seguirla y no tuvieran a mano, la delegada territorial de la Junta de Castilla y León en Zamora, Leticia García, ha asegurado este miércoles a los periodistas que ha sido «una medida unilateral que ha adoptado el director, no siguiendo ninguna directriz y generando además cierta alarma social». A su juicio, la recomendación de usar mascarilla en el centro educativo se ha adoptado «sin criterio técnico» y sin haberlo acordado el órgano gubernativo de ese instituto público, por lo que desde la dirección provincial de Educación se ha requerido al centro para que de marcha atrás en esa decisión y va a enviar a inspectores educativos para comprobar que se cumple la normativa.
A juicio de la representante de la Junta de Castilla y León en la provincia de Zamora, esa medida «no es operativa» y «no sirve de mucho» porque los alumnos luego van sin mascarilla en el autobús, en el cine y en otros lugares. En vez del uso de la mascarilla, Leticia García ha considerado que en los centros educativos son más adecuadas otras medidas como la ventilación, el uso de lectores de CO2 en las aulas, el lavado de manos o no llevar a los alumnos a clase en caso de que presenten sintomatología compatible con infecciones respiratorias.
La dirección del centro educativo argumentó la recomendación de usar mascarilla por las tasas de incidencia de los virus respiratorios y porque era un consejo de la Organización Médica Colegial, que consideraba que su uso podía ser conveniente de forma voluntaria en determinados lugares muy concurridos.