No estropees tus vacaciones, ¡protégete del sol!

Playa, sol, piscina, juegos… Estas son sólo algunas de las cosas en las que pensamos cuando alguien dice “verano”; una palabra que resulta mágica y que hace que esbocemos una sonrisa. Pero ¡cuidado! ya que la época estival es propicia para que la piel de los más pequeños de la casa se vea perjudicada, así que, sigue nuestros consejos y no arruines tus vacaciones.

Una vez pasadas las vacaciones de Semana Santa, el verano está cada vez más cerca; los niños sueñan con la piscina y la playa, y los padres con un merecido descanso. Pero para que no haya inconvenientes durante estos días de ocio, sigue estos consejos de la Doctora Eulalia Baselga, dermatóloga pediátrica y asesora de Imaginarium en el desarrollo de su fotoprotector infantil Happy Sun.

• Aplica una crema protectora de índice 15 o superior.
• Busca la sombra y evita el sol entre las 11 y las 16 horas.
• Cubre el cuerpo con ropa y aplica la crema en casa 30 minutos antes de salir.
• Vuelve a aplicar la crema al menos cada hora y media y, más a menudo si nos bañamos o sudamos.
• Ponte crema aunque esté nublado o estéis en la sombra.
• No expongas al sol a bebés menores de 36 meses.
• Bebe abundante agua y toma alimentos fotoprotectores.
• Usa una buena crema para después del sol.
• No conserves los fotoprotectores del año anterior.
• Enseña a los niños a protegerse con tu ejemplo.
Esto último es algo fundamental, ya que, como en todo, los niños aprenden con el ejemplo que les dan las personas mayores y más si son sus padres.

«Creo que los padres conocemos la importancia de la aplicación del filtro solar, pero hay que insistir en la reaplicación y la no exposición en las horas centrales del día. Además, gracias a las campañas de comunicación que desde hace años se realizan con el fin de informar de los efectos del sol, tanto dañinos como beneficiosos, y también a la insistencia de los dermatólogos con todos nuestros pacientes, cada vez se hacen más consultas en relación a los fotoprotectores solares», afirma Raquel Novo Lens, médico especialista en dermatología.

«Cada vez más, la población en general y los padres, en particular, son conscientes de la importancia de una adecuada protección solar en la infancia. Las quemaduras en la infancia se ha comprobado que se asocian a un mayor riesgo a desarrollar lesiones premalignas y malignas durante la edad adulta. Además son un importante factor que provoca envejecimiento prematuro de la piel», cuenta José Luis López Estebaranz, jefe del servicio de Dermatología del Hospital Universitario Fundación Alcorcón de Madrid.

Debemos tener en cuenta que todos los cuidados que le ofrezcamos a la piel de los bebés son pocos, ya que así evitaremos que tengan problemas de piel cuando sean mayores.
“Han acudido pacientes a mi consulta con signos de quemadura solares sufridas durante la infancia y sobreexposición solar. Las quemaduras solares si son intensas dejan como señal los llamados léntigos actínicos, (manchas marrones tipo peca en espalda, hombros…)”, asevera José Luis López.