Los mentores, una pieza insustituible en Top Scientists

Last but not least… Tenemos con nosotros a Mar Casado,  Luis Jiménez y Rubén Martos. Todos ellos trabajan para 3M, donde Mar es product development specialist; Luis, business development manager, y Rubén, EU REACH Registration Coordinator. Los tres, además, han sido mentores en distintas ediciones del concurso Top Scientists. A continuación, nos trasladan su experiencia orientando a los alumnos para desarrollar sus proyectos.

¿Cuál es el papel de los mentores en el concurso Top Scientists?
–Mar: Básicamente tienes que asegurar que los participantes presenten el proyecto en fecha y en forma para poder ser evaluados. Para ello acabas haciendo muchos papeles: tranquilizador de nervios, organizador de ideas, recordatorios variados, bajar las cabezas de la luna, cuando es el caso… Los chicos son fantásticos y las ideas que presentan, brillantes, pero a veces les cuesta tener disciplina para plasmarlo todo en el proyecto que tienen que entregar.

–Luis: Hacemos las veces de orientador, guía, ayudamos a los alumnos a enfrentarse a un proyecto científico y a preguntarse cuestiones que no se habían planteado. Nuestra función es de soporte, porque el trabajo lo hacen ellos.

–Rubén: Debes acompañar a los alumnos y guiarles para finalizar su proyecto SIN hacerles el trabajo. Para mí, la principal labor del mentor es la guía. Muchas veces los chavales no tienen herramientas para seguir con el proyecto o se bloquean en una idea; creo que la labor del mentor está en proporcionarles las herramientas para que generen más soluciones, más ideas y se pueda seguir adelante.

Otra de nuestras labores es la de mediar entre ellos. No olvidemos que son jóvenes, y puede que haya discrepancias a la hora de encaminar el proyecto. Para eso está el mentor, para asegurarse de que ambos participan igualitariamente y que están de acuerdo en lo que van a llevar a cabo.

Los mentores también revisamos su trabajo y lo corregimos si vemos que van mal encaminados. No olvidemos que esto es un concurso, así que, de cara a la fase final, ensayamos con ellos para que puedan brillar lo máximo posible en la gala y sus nervios se minimicen.

¿En qué aspectos suelen requerir los alumnos y alumnas una mayor orientación?
–Mar: La ayuda puede ser muy variada. En mi caso tenía una persona tremendamente tímida y otra persona muy extrovertida. Como podéis imaginar, la orientación para una y otra fue complemente diferente. En general tienes que orientar a focalizar lo que quieren presentar, que se entienda bien su idea, que el trabajo esté bien repartido entre ambos participantes y que la comunicación sea de calidad.

–Luis: Principalmente a la hora de darle una segunda y una tercera vuelta a las cosas. Son muy creativos e imaginativos pero siempre viene bien ayudarles a que vayan un pasito más allá.

–Rubén: Los chicos nos vienen con una idea normalmente genial (por eso han pasado a esta fase), pero el primer problema es cómo aterrizarla y cómo convertirla en un proyecto, así que la primera orientación es qué pasos hay que seguir para poder llevarlo a cabo.

Hacia el final del programa suelen surgir muchas dudas sobre cómo generar un prototipo, la presentación en sí misma, cómo escribir la memoria, etc.

A usted, personalmente, ¿qué le ha aportado su participación como mentor?
–Mar: En general siempre es enriquecedor compartir visiones con adolescentes. Tienen una forma de pensar muy diferente y si te tomas el tiempo de escucharles descubres que te pueden enseñar mucho sobre cómo gestionar el trabajo (emplean y conocen métodos que eran desconocidos para mí), saben adaptarse a algo que no conocen (para ellos la vida tiene todavía mucha parte de misterio y lo suplen con ese entusiasmo que les caracteriza) , y me encanta la energía que les aporta ser amigos, amigos de forma incondicional… Esto último a veces se nos olvida cuando vamos siendo más mayores… Si la otra persona no se adapta a lo que nosotros somos, separamos nuestros caminos… A veces la magia surge de la diversidad, no de la igualdad.

–Luis: Me encanta trabajar con alumnos en estas edades porque puedes ayudar de una manera directa en su desarrollo y formación, y más desde el punto de vista extraescolar, como es el caso de Top Scientists.

–Rubén: Es una experiencia muy gratificante, porque te contagias de la ilusión que los chicos tienen por llevar a cabo su proyecto. Ver que chicos tan jóvenes son capaces de hacer esas cosas te alegra el día.

¿Cuántas veces ha sido mentor/a de Top Scientists?
–Mar: Es mi primera vez.

–Luis: Sólo una edición (y tuvimos la suerte de ganar ).

–Rubén: He sido mentor en las tres ediciones. He repetido porque me pareció buena experiencia y creo que nosotros también aprendemos y a lo largo de las ediciones tenemos más que aportar. Al final, conocer bien los detalles del concurso te ayuda a centrar a los chicos y chicas y que saquen el máximo provecho de su experiencia.

¿Cada año los proyectos de los chicos y chicas se superan?
–Luis: Sobre todo cada año la participación es mayor y se reciben muchas más propuestas de proyectos. Es increíble ver lo preparados que están los participantes.

–Rubén: No tiene por qué. En la primera edición hubo proyectos tan buenos como ha habido en las últimas.

¿Qué cree que se llevan ellos del concurso?
–Mar: Los chicos, y ellos así lo sienten y lo expresan, se llevan una experiencia única. Se sienten, por una temporada, en el “mundo real” donde pueden tener una idea y llevarla a cabo. Es una especie de prueba del mundo adulto a nivel profesional, con toda la carga personal y emocional que ello lleva asociado. Sienten que desarrollando su idea aumentan su autoestima, algo clave en la edad de los participantes.

–Luis: Una experiencia diferencial: poder desarrollar tu propio proyecto, en un ámbito fuera de la escuela, ver las materias desde otra perspectiva y tener la posibilidad de presentar tu proyecto, defenderlo y disfrutar haciéndolo. Si además eres ganador, la experiencia de poder ir a USA, visitar nuestras instalaciones como premio, es la guinda del pastel junto con el orgullo de poder colaborar con tu colegio o instituto con la ayuda para el laboratorio.

–Rubén: Independientemente de si ganan (con premio) o no, creo que lo que se llevan es un aprendizaje enorme. Ellos pasan tres meses en contacto cercano con lo que es el mundo empresarial. Nosotros les enseñamos que su idea pasa de algo efímero a una realidad, a un proyecto completo, vendible, realista. Creo que para ellos vivir esto es una gran experiencia.

También estar en contacto con chicos de otros colegios les aporta mucho. El día de la gala, a pesar de los nervios, ves cómo se relacionan, se ríen, se sienten protagonistas. Creo que esa es la clave que no se nos debe de olvidar, que a pesar de que a la gala vengan autoridades, celebridades, etc., esto es por y para ellos. Ellos son ese día las estrellas.

¿Qué le ha llamado la atención de cómo estos jóvenes científicos afrontan Top Scientists? 
–Mar: Sobre todo el entusiasmo, esos ojos de descubrir el mundo. La energía de los adolescentes es una energía muy alta, a veces hay que dirigirla hacia el objetivo, pero tienen tanta que pueden derrochar en otras cosas también…

–Luis: La madurez con la que afrontan ciertas situaciones a las que no se han enfrentado nunca, tienen mucho sentido crítico.

–Rubén: Primero me llama la atención de que se les ocurran tales proyectos con el conocimiento que tienen y lo jóvenes que son. Pero lo que más me sorprende siempre es lo bien que exponen en público. Enfrentarse a una gala con un jurado que les valora, con autoridades, con su familia, no es fácil, pero hasta ahora no ha habido ninguna pareja que lo haya hecho mal. Siempre brillan y se crecen, y eso me asombra.

¿Ha sentido que estaba fomentando vocaciones científico-tecnológicas con su mentoría?
–Mar: En mi caso, la vocación estaba ahí de base. Eran dos personas con mentes muy técnicas (sobre todo uno) que tenían claro que su carrera profesional se basaría en STEM , en este caso en la parte Tecnológica.

–Luis: Sin duda, es una de las partes más relevantes y que más me motivan para participar en esta iniciativa, poder colaborar en sembrar y hacer crecer el espíritu científico en los jóvenes.

–Rubén: Sí, sobre todo he sentido que les he acercado al mundo real. En el instituto tendemos a pensar que las ciencias son poco más que teorías y que solo sirven para los que estudian mucho y acaban en la universidad. Y lo que aquí enseñamos es cómo se hace ciencia en una empresa real, y creo que eso les llama mucho la atención.

¿Qué le diría a los jóvenes que se están planteando participar este año en Top Scientists?
–Mar: Les diría que todos los participantes estuvieron encantados de hacerlo. Pasaron nervios, intranquilidad, miedo a no llegar, competitividad, enfados y también alegría, descubrieron de qué eran capaces y finalmente estuvieron muy muy orgullosos de lo que habían logrado y que sus compañeros, profesores, familia y gente de 3M lo vivieran con ellos.

–Luis: ¡Que no lo duden ni un minuto, se pongan a pensar en un proyecto y nos envíen su video!

–Rubén: Les diría que el programa merece la pena, que si tienen una buena idea y un intereés por la ciencia van a aprender  y a disfrutar mucho, pero que no se olviden que esto es un programa que no deja de exigirles un tiempo y un compromiso. Y que para que ellos saquen lo mejor de sí mismos, tienen que tener en cuenta que sobre todo en la fase final, de cara a la gala van a tener que echarle tiempo y dedicación, pero que les va a merecer la pena.

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