La AECC en Madrid, premio metrodora a la Innovación en Formación Profesional
Cartel del I Congreso de Voluntariado de la Asociación Española contra el Cáncer en Madrid, celebrado el 30 de noviembre de 2023 en la Facultad de Medicina de la Universidad Complutense.
La Asociación Española contra el Cáncer (AECC) en Madrid será merecedora del premio metrodora a la Innovación en Formación Profesional, un reconocimiento se incluye por primera vez en la XVI edición de los Premios Magisterio a la Formación Profesional.
Con esta distinción se quiere reconocer la labor de la AECC en Madrid por su proyecto de voluntariado responsable junto a metrodora FP, que pretende mejorar la cualificación técnica y humana de los futuros profesionales sanitarios, que pueden acercarse desde el primer curso a la labor de la asociación en investigación, prevención y divulgación y a cómo se vive, desde las unidades de radioterapia oncológica, el acompañamiento a los pacientes oncológicos y a sus familias.
Esta iniciativa de colaboración y apoyo mutuo nace en el marco de la nueva ley de FP, y facilita a los estudiantes el acceso a las investigaciones más punteras en España, con investigadores de renombre explicándoles los proyectos en los que están involucrados y cómo pueden contribuir a mejorar los tratamientos oncológicos.
Se trata de un proyecto intergeneracional de voluntariado formativo que permite a los alumnos de FP involucrarse en la labor de la AECC en 44 hospitales públicos y privados en la Comunidad de Madrid, un proyecto que se ajusta al plan de formación en organismo equiparado que también contempla la nueva ley, dado que los psicólogos, pedagogos y voluntarios de la AECC guían, junto al equipo de metrodora FP el aprendizaje del alumno voluntario. Un aprendizaje que pronto –es el próximo reto– podrá traducirse en unos resultados de aprendizaje que curricularmente queden reflejados en las notas de los alumnos.
Esta experiencia piloto, puesta en marcha en el curso 2023-24 en la Comunidad de Madrid y dirigida inicialmente a estudiantes de los ciclos de Radioterapia y Dosimetría e Imagen para el Diagnóstico y Medicina Nuclear, ha funcionado tan bien que el modelo se ha replicado en Cantabria, Castilla-La Mancha y Castilla y León y abierto a otros ciclos formativos.
Para los estudiantes que participan como voluntarios, supone una puerta a la experiencia profesional en entornos reales de salud, una plataforma para el desarrollo personal y profesional, y una oportunidad para desarrollar habilidades tan valiosas como la empatía, el liderazgo y la responsabilidad social y comprender mejor las realidades del cáncer, ampliando su visión del impacto colectivo que pueden tener en la sociedad, uniéndose a una red de voluntarios comprometidos en la lucha contra el cáncer. A su vez, con su voluntariado, los estudiantes están contribuyendo a mejorar de la calidad de vida de los pacientes y sus familias.