Cientos de docentes se manifiestan en Santander por una adecuación retributiva "digna"
La manifestación, convocada por la Junta de Personal Docente (ANPE, STEC, CCOO, UGT y TU), ha discurrido desde la Consejería de Educación hasta la sede del Gobierno regional.
La manifestación, convocada por la Junta de Personal Docente (ANPE, STEC, CCOO, UGT y TU), ha discurrido desde la Consejería de Educación, situada en el Río de la Pila, hasta la sede del Gobierno regional, en Peña Herbosa, donde se ha dado lectura de un manifiesto. La protesta también ha buscado reforzar a los sindicatos en su negociación con el Gobierno regional, que ayer hizo una primera propuesta que, según los convocantes de esta protesta, es «insuficiente». «Seguiremos movilizándonos porque nuestro salario, nuestra dignidad y la educación pública de Cantabria están en juego», han advertido los docentes en ese manifiesto.
Esta manifestación ha estado precedida de un nuevo encierro esta noche de unos 40 docentes en el instituto Santa Clara de la capital cántabra, después de que ayer la Consejería pusiese sobre la mesa su primera propuesta de adecuación retributiva, que, además de una subida salarial desde septiembre de 2025, incluye complementos vinculados al absentismo y la formación. «Estar enfermo no es absentismo», «con esta propuesta sigue la protesta» o «consejero, ¿dónde está el dinero?» han sido algunos de los cánticos entonados por los asistentes, unos 2.000 según la Junta de Personal Docente.
Una oferta «insuficiente»
La Junta de Personal Docente, según ha afirmado su presidenta, Rus Trueba (ANPE), valora «muy positivamente» que, «más de un año y medio» después de solicitar la negociación de la actualización retributiva y tras «17 años de espera», haya comenzado esta negociación, aunque creen «insuficiente» esta primera oferta. Consideran que la propuesta de subida está lejos de lo que reclaman los sindicatos y «apenas representa un tercio» de la cantidad que piden. Mientras que la Junta de Personal ha solicitado un incremento de 325,66 euros, implementado en cuatro plazos anuales, la Consejería ofrece 90 euros distribuidos en tres plazos, ha lamentado Trueba.
«Proponen consolidar una pérdida de poder adquisitivo del 72% y desvincular nuestro salario del IPC, lo que nos condena a nuevas pérdidas económicas desde este mismo año. Mientras cada mes perdemos más de 320 euros debido a la inflación», lamentan los docentes. También denuncian que se da a entender que «las bajas médicas son inventadas»: «Como si los docentes fuéramos sospechosos de enfermarnos por placer».
«Más trabajo a cambio de migajas»
Y censuran que se les «exija triplicar las horas de formación necesarias para percibir los sexenios, pasando de 100 a 300 horas, y además se imponga cuándo y en qué actividades realizar hasta 250 de esas horas». Según recoge el manifiesto, «lo más indignante es que los escasos incrementos retributivos en los sexenios se acumularán solo para quienes lleven más de 30 años en la docencia, dejando fuera a una gran parte del colectivo, que jamás verá reflejada esa subida en su nómina».
«Dicen que no hay dinero, pero sí hay recursos cuando se trata de subvencionar a las empresas de la enseñanza privada-concertada o para que la presidenta y sus consejeros se suban el sueldo, pero no a quienes sostenemos el sistema educativo con nuestro esfuerzo diario. Nos exigen más trabajo, burocracia, formación, sacrificio… a cambio de migajas», han apostillado.