Catalá: “El aumento de la ratio tiene que ir aparejado a la demanda de las familias”
“No establecer una ratio concreta de alumnos por aula, sino que el margen de incremento del 20% propuesto por el Ministerio vaya aparejado a la demanda real de las familias con respecto al centro”. Esa es la idea que trasmitió la consejera de Educación, Formación y Empleo de la Comunidad Valenciana, Mª José Catalá, en la nueva edición de los Desayunos Magisterio, que celebró nuestro periódico el pasado lunes en el Centro de Innovación BBVA en Madrid. “Las familias sabrán que hay un máximo de 25 alumnos por aula en Primaria, pero que hay posibilidad de incrementar esa cifra en un 20% en función de las necesidades de escolarización y de las solicitudes de matriculación”, explicó.
Eso sí, la consejera dejó claras dos salvedades: “el respeto absoluto a la ratio fijada en la LOE, por un lado, respecto a la escolarización en régimen ordinario del alumnado con necesidades educativas especiales, y, por otro, a los alumnos de los centros de acción educativa singular”.
Continuando con las políticas de ajustes anunciadas la pasada semana por el Ministerio, Catalá también se refirió al posible incremento de las tasas universitarias. “Estamos por detrás de Cataluña, Madrid o Navarra en estas tasas y aportamos una media anual de 7.500 euros por alumno, cuando la media nacional es de 6.700”, apuntó. Por eso, consideró que “es un momento importante para reconsiderar nuestras tasas”, aunque también indicó que “es un ahorro relativo,ya que si incrementamos hasta un 20% respecto al coste de formación de los alumnos, podríamos ahorrar entre 40 y 45 millones de euros”.
Por este motivo, la consejera se mostró partidaria de quitar importancia al incremento de tasas –aunque pueda ayudar económicamente– y fijarse más en la racionalización de las titulaciones. “Hay que incidir más en el mapa de titulaciones, de forma que evitemos su duplicidad en un ámbito territorial relativamente cercano”, manifestó. En este sentido, Catalá aportó algunos datos sobre titulaciones y másteres, “que en algunos casos no alcanzan los 20 alumnos”.
La consejera también apostó por “vincular determinadas ayudas que destina la Generalitat para libros, transporte escolar y comedor al rendimiento académico de los alumnos”. El objetivo, a su juicio, es “fomentar que los padres se involucren más en la Educación de sus hijos”, aunque reconoció que “va a ser más complicado trabajar con el rendimiento en transporte y en comedor, pero en becas de libros sí que puede ser más fácil”. Según Catalá, “teníamos un criterio de universalidad, y ahora lo vamos a transformar en criterio de renta, pero es muy importante que para el acceso a esa beca el alumno tenga aprobadas una serie de asignaturas el próximo curso”.
Contrato tutor-familia
Esta última medida entra dentro de un contrato-programa que la Conselleria quiere establecer entre el tutor y la familia y que dejará constancia escrita de los compromisos entre ambas partes para conseguir el éxito del alumno. Aquí se encuadra el programa Èxit que se empezó a desarrollar en el curso 2007-08 incorporando de forma voluntaria a 15 profesores y a 120 alumnos, pero que a fecha de hoy supera los 1.500 alumnos y el centenar de profesores. El objetivo de este programa es mejorar los resultados académicos de los alumnos con dificultades a través de dos fases compuestas de actividades de refuerzo fuera del horario lectivo. La fase A, de carácter preventivo, se de-sarrolla en mayo y junio con actividades al terminar la jornada escolar. Aun así, para aquellos alumnos que al acabar el curso no superan algunas de las materias instrumentales, en la fase B se ofertan actividades de refuerzo para afrontar el siguiente curso escolar con garantías de éxito. La consejera indicó que “el 80% del alumnado participante supera las materias en las que presentaba dificultades”. Los profesores que participan obtienen créditos en materia en formación que contribuyen al reconocimiento de los sexenios.
Favorecer la Concertada
También hubo ocasión para hablar de la red concertada. “Nosotros vamos a favorecer los centros de iniciativa social no tanto por nuestras estrecheces económicas sino por convicción clara, y es que el 70% del alumnado está en centros públicos y no llega al 30% en concertados y privados”, manifestó Catalá.
Por eso anunció que la Conselleria “está trabajando ahora mismo en la tramitación de una decena de centros para que se pongan en marcha al final de este año o principios del que viene”. Con todo, dejó claro que “no crearemos centros donde nosotros consideremos, sino donde haya demanda y hagan falta”. Sobre la zona única de escolarización madrileña, aseguró que “le gusta mucho” y consideró que “es un modelo exportable”.