Un 54% de profesores cree que las prácticas no les preparan para dar clase
Estos son algunos de los datos que se incluyen en el informe «The teaching profession in Europa», de la Comisión Europea, que han sido abordados por diferentes representantes de la comunidad educativa catalana en una jornada de trabajo organizada por la Fundación Jaume Bofill, en Barcelona. Los datos del informe alertan de la alta feminización de la profesión, de un envejecimiento progresivo de los docentes europeos y una falta de relevo de jóvenes, que ven cómo se precariza su situación laboral, ha indicado Peter Birch, coordinador de política educativa y análisis de sistemas de la Comisión Europea. Birch ha dado a conocer en el inicio de la jornada las principales referencias del informe, que se ha elaborado con cifras estadísticas de la red Eurydice, del Eurostat y del informe de la OCDE Talis 2013, aportando datos comparativos de 35 Estados europeos.
Una de las principales conclusiones es que solo el 60% de los docentes europeos se sienten bien preparados con la formación que reciben, aunque ese porcentaje desciende al 40% cuando se refiere a los contenidos pedagógicos que se les facilitan para abordar el trabajo en el aula. En España, un 75% de los docentes se cree correctamente preparado en cuanto a contenidos, una proporción que desciende al 37% cuando se abordan las herramientas pedagógicas y al 46% al valorar las prácticas que se realizan durante los estudios.
«Éste es un mensaje contundente», ha valorado Birch, que se ha preguntado qué ocurriría si ese mismo nivel de percepción de preparación lo tuvieran un cirujano o un piloto de avión. «Sin embargo, dejamos que estos docentes que se creen poco preparados den clase a nuestros hijos», ha indicado, para añadir que «se ha de mejorar la formación del profesorado», tanto la inicial como la continua a lo largo de la carrera profesional.
El informe considera que uno de los pilares para mejorar la calidad educativa es enriquecer la formación de los docentes, y muestra que en algunos países la formación inicial no cubre aspectos clave para el ejercicio profesional posterior. También recomienda la necesidad de reforzar el desarrollo profesional de los docentes y el compromiso ético con la Educación como un bien común, además de progresar en la cooperación profesional y en el intercambio de conocimiento y de prácticas innovadoras entre el profesorado europeo. En este sentido, el estudio de la CE constata que menos de un tercio de los profesores europeos han hecho estancias profesionales en el extranjero, y que el atractivo de la profesión docente varía considerablemente entre los diferentes países, además de ser multicausal: condiciones laborales, colaboración en docentes o sistemas de evaluación, entre otros aspectos.