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“Las matemáticas son un pilar que nos permite libertad de pensamiento total”

Inspirador para alumnos y profesores. Conocimiento y buen humor. Juego y rigor. Las matemáticas son mucho más que una serie de cálculos y operaciones, son una manera lógica de pensar, de acercarse y disfrutar del mundo.
Estrella MartínezMartes, 12 de abril de 2016
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Eduardo Sáenz de Cabezón es doctor en Matemáticas, profesor del Departamento de Matemáticas y Computación de la Universidad de La Rioja e investigador en el área del Álgebra Computacional. Además es un divulgador nato. Le apasionan las matemáticas y sabe cómo compartir su entusiasmo y conocimiento con grandes dosis de humor y cercanía.

El libro se titula Inteligencia matemática, ¿qué es esta inteligencia?
La inteligencia tiene distintas formas de expresarse y además hay distintas habilidades que forman parte de ella. Las matemáticas entran dentro de lo que podríamos llamar el razonamiento lógico o lógico computacional o lógico geométrico. Hay diferentes inteligencias matemáticas también y esto tiene muchas implicaciones a nivel educativo.

¿Qué tipo de implicaciones?
Si no tenemos esto en cuenta, estamos enseñando a todo el mundo de la misma forma y al mismo tiempo. Hay modos de razonar en matemáticas muy diferentes y cada alumno puede aprender las matemáticas desde su propia forma de ser matemático. Yo creo que todos somos matemáticos, pero no todos de la misma forma.

¿Por qué deberíamos leer el libro con lápiz y papel?
Todo libro debe leerse con lápiz y papel, pero en este caso hay muchos momentos en los que hay razonamientos que son un poco más complejos y está bien poder parar un segundo la lectura. Yo animo a parar, a jugar con lápiz y papel. No es un libro para leer atropelladamente. También tiene ejercicios para poner en práctica esa inteligencia matemática que estamos describiendo, experimentarla en primera persona. Todos los ejercicios tienen unas pistas y también están las soluciones.

Ya ha dicho que todos somos matemáticos y en el libro habla de nuestro matemático interior.
Sí, todos tenemos una capacidad matemática, aparte de la capacidad de cálculo o aritmética básica. Todos tenemos un lógico en el interior, un matemático que seríamos capaces de desarrollar. Está bien que dialoguemos con él por muchas razones, aunque destaco: para disfrutar de la realidad y como herramienta para ejercer la ciudadanía responsable, crítica.

¿Por ejemplo?
Acabo de visitar la Alhambra y allí hay mucha decoración basada en la geometría. Además de disfrutar de la belleza plástica, la comprensión matemática nos proporciona un disfrute mayor. Esa belleza se basa en distintos tipos de geometría que han sido matematizados, medidos. En cuanto a la ciudadanía crítica, ves el sueldo medio de España, te dicen que ha subido un poquito y tú piensas que no estamos tan mal. Pero si uno va a estudiar la estadística que hay ahí, se pregunta, ¿es la media la estadística que me importa? Si vas a otras medidas estadísticas, te das cuenta de que los sueldos altos han subido y los de los empleados han bajado, y eso tiene una lectura política evidente.

¿Cree que mucha gente puede sentir que no desarrolla su matemático interior?
Sí, creo que hay un problema de autoimagen, de frustración. Las matemáticas tienen dificultad, es verdad. La mayor dificultad puede ser en la enseñanza su carácter acumulativo; si no sabes sumar, no vas a saber multiplicar, y si no sabes sumar y multiplicar, no vas a poder resolver ecuaciones, y así con todo. Hay otra dificultad para la enseñanza y es que en muchos casos la gente lo ve como que es algo que no tiene que ver con ellos, como algo abstracto y ajeno. Y luego, por otro lado, está que la exposición que tenemos a las matemáticas es instrumental, vemos las operaciones, cómo funcionan y ya está. Es como si el profesor de Lengua solo pudiera dar en la clase la sintáxis y nunca apareciera la poesía, el teatro, el cine. Bueno, pues la poesía, el teatro, el cine que tienen las matemáticas están fuera de la escuela. También se dice que si se te dan bien las matemáticas, eres listo y, si no, tonto, lo que genera frustración y un daño a la autoimagen.

Según el libro, es tan importante la intuición como el cálculo, la imaginación como la técnica.
Sí, está claro que el cálculo y la técnica –de diferenciación, de trigonometría…– son importantes. Sin embargo, yo que me dedico a la investigación en matemáticas en álgebra, veo fundamental para mi trabajo la creatividad y la intuición. Todas las matemáticas que existen vienen de la intuición y de la
creatividad de generar nuevos resultados, de ver nuevas aplicaciones de lo que ya se conoce… Al final son unas reglas que no son un corsé que nos impide pensar; al revés, son unos pilares que nos permiten una libertad de pensamiento total.

En su charla Las matemáticas son para siempre –más de 1.200.000 visitas en la Red– dice que las mates dominan la intuición y la creatividad.
La intuición como fuerza creativa es maravillosa, pero la intuición como criterio de verdad no puede ser la única y aquí las matemáticas vienen en nuestra ayuda. Que en un grupo de personas haya dos que cumplan años el mismo día ¿es casualidad? Uno diría, hombre es casualidad, 50 personas, 365 días al año… pues no es casualidad, lo que sería casualidad es que todos cumplieran en días diferentes. Haciendo las cuentas, uno doma la intuición.

Hace monólogos, tiene un canal de YouTube. ¿Cómo nacieron estos espectáculos matemáticos?
Yo soy cuentacuentos desde hace muchos años. Como matemático daba charlas en coles, en bares. Entonces surgió un concurso de monólogos científicos –FameLab–, me apunté y gané. En la semifinal nos conocimos los participantes, nos gustó mucho lo que vimos en los demás, pensamos que podía funcionar como un espectáculo y creamos Big Van. Que la gente pudiera acercarse a la ciencia de una forma suave, de una forma entretenida. Entonces decidimos lanzarlo y actuamos en teatros, institutos, universidades… La cosa ha crecido muchísimo, estamos actuando por toda Latinoamérica y por España. Tenemos también un proyecto con Fundación Telefónica, LocosXCiencia, en el que además de monólogos damos formación a profesores. Los profesores pueden ser un referente atractivo para los alumnos mostrando su pasión por la materia. Yo creo que eso es fundamental.

La cercanía y buen humor de sus vídeos y actuaciones demuestran que otra forma de hacer matemáticas es posible.
Las matemáticas lúdicas, el divertimento matemático, también pueden ser una herramienta didáctica que no va en contra de los objetivos de la enseñanza matemática. La capacidad de abstracción, evitar el numerismo, ser capaces de utilizar las matemáticas en nuestra vida diaria, esas habilidades. Todo lo que aportan las matemáticas no solo se puede aprender haciendo ecuaciones. También hay otros medios de aprender y el aspecto lúdico de las matemáticas yo lo reclamo mucho, hay gente que es muy crítica con esto. Yo creo que estamos preparados desde pequeños para aprender jugando y es una pena que de mayores lo olvidemos. Nadie me puede decir que estoy banalizándolas, que las matemáticas son otra cosa. No, perdona, yo hago matemáticas y me dedico a las matemáticas. Sé de lo que van y no está reñida una cosa con la otra.

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