“El préstamo de libros empobrece la propuesta de materiales curriculares”

Rosa Luengo comienza su carrera en la Escuela de Formación del Profesorado de Orense, especializándose en Educación Infantil. Ha trabajado en diversas profesiones del ámbito educativo hasta que, en 2014, asumió la responsabilidad de ser la directora de Creación Editorial del Grupo Edelvives, cargo que desempeña en la actualidad. Ha publicado estudios y análisis en distintos medios especializados en temas educativos.

¿Cuál es su posición en el sistema de préstamo que ha impulsado la Comunidad de Madrid?
El tema del sistema de préstamo, y me gusta que lo denomines como préstamo y no como gratuidad, es una situación de inquietud, no solo a nivel editorial, sino a nivel de todos los agentes involucrados en el ámbito del libro y del libro de texto, porque va a suponer una merma en el movimiento de los libros en el mercado.

¿Le parece que hay un cierto engaño en esta idea que se está vendiendo de gratuidad?
Hablar de engaño sonaría como una acusación un poco fuerte y yo no soy quién para realizarla, pero es verdad que lo que se está desarrollando es más un sistema de préstamo.

En Madrid, además, previo pago de los padres.
Por lo menos hay que apuntarse al programa. Esto es un problema a todos los niveles, porque estamos hablando también de vulneración de los derechos de autor.

¿Por qué vulneración?
Porque se están reutilizando libros de manera permanente. Los autores tienen derechos de autor por la venta de sus libros, sin embargo, los sistemas de renovación de libros están parados.

¿Esto no se ha llevado nunca a los tribunales?
La verdad es que no. Creo que serían medidas bastante antipopulares. A nosotros como editorial no nos interesa entrar en ese sistema y en esa vorágine, pero a mí es un tema que me preocupa. Los acuerdos de derechos por la venta de estos libros se reducen de manera drástica con este sistema.

¿Sería algo similar al sistema de pirateo masificado?
Ordenado. Evidentemente se puede mirar desde ese punto de vista. Es una situación muy complicada.

¿Qué otros problemas está generando este sistema de préstamo?
Un sistema de préstamo de libros, en lo que respecta a materiales curriculares, empobrece la propuesta. ¿Son los libros de lectura considerados material curricular?

¿Es un sistema poco abierto a la innovación?
Creo que los tiempos van por otros derroteros y se incorporan propuestas que se sustentan sobre otro tipo de materiales que no son estrictamente las asignaturas curriculares y que pueden aportar valor.

¿Es usted de la opinión de que la gratuidad ha sido una baza política de Ciudadanos?
Sí, yo creo que esto está en el ambiente. Esto no lo llevaba el PP en su programa y sí lo llevaba Ciudadanos como elemento bandera. A mí me parece que va a ser muy difícil tener todos los cabos bien atados.

¿Por qué en el caso de Madrid el tema despierta tanta alarma cuando ya se ha hecho en otras comunidades?
En Madrid hay un amplio sector de enseñanza concertada. Los centros concertados son libres de acogerse al proceso de préstamo, sin embargo, los padres saben que pueden tener los libros gratis y, por lo tanto, presionarán al centro para que se acoja a la gratuidad. La repercusión de esta medida es que podría limitar a estos centros a la hora de diferenciarse.

¿Los centro públicos están obligados a acogerse a esto?
Sí.

No hay cosa más injusta que tratar a todo el mundo por igual, ¿no? ¿No cree que al final perdemos todos al obtener un servicio de peor calidad?
Es muy complicado implantar todo esto y que el resultado sea satisfactorio.

¿Esta medida diezma a las editoriales?
Evidentemente.

¿A Edelvives le está afectando directamente?
A todas las editoriales.

¿Las librerías también se verán muy afectadas?
Sí. Tienen que ver cómo se acoplan a este nuevo escenario. Deben buscar qué valor añadido pueden aportar para ser una empresa de ámbito cultural.

¿Sería el propio colegio el tercer gran afectado?
Sí. En los colegios la gestión será un lío te acojas o no al sistema de gratuidad.

¿Entrará el libro digital en este sistema de préstamo?
Está en proceso de análisis. Las licencias digitales de un material curricular tienen un coste y tienen una caducidad. Los libros digitales, además, son libros fungibles, dejan una trazabilidad del alumno. Las licencias no son heredables, a menos que estemos hablando de un PDF. Hay que tener en cuenta, en cuanto a la gratuidad, que el precio de la licencia digital hay que multiplicarlo por cuatro.

¿No hay relación entre lo que se “gana” por no fabricar los libros de texto y si mantener los libros digitales?
No tienes coste de papel, no tienes coste de impresión, sin embargo, todo el coste de creación es exactamente el mismo y luego tienes unos costes asociados a unos perfiles profesionales más caros que el coste de una persona que está en una máquina imprimiendo.

¿Han analizado el precio, en el caso de que un gobierno os pidiese un presupuesto para papel y para digital?
Tendríamos que sentarnos y hacer bien las cuentas.

Se suele pensar que lo digital es más barato.
El libro digital requiere de un cuidado que el libro en papel no necesita.

¿El sistema de préstamos, con todos sus problemas logísticos, puede incentivar a que se pase a lo digital?
Me parece un disparate pasarte a lo digital totalmente, pasar del 0 al 100. Tiene que ser un proceso paulatino.

¿Es recomendable transitar hacia lo digital?
Hacia lo digital hay que ir, pero yo no soy de las que se posiciona en la dicotomía entre papel y digital. Creo que el mundo es híbrido.

¿Qué opina del movimiento “no texto”?
Últimamente se ha incrementado bastante, debido, sobre todo, a las mayores facilidades de comunicación. Sin embargo, hay que diferenciar qué es material propio y qué es una suma de recortes. Otros interrogantes que habrá que resolver son: ¿Qué gestión de los materiales propios se puede hacer? ¿Quién custodia las garantías de la transmisión?