El 92% de los profesores pide más medidas disciplinarias
Medidas para mantener la convivencia en los centros y evitar la indisciplina. Eso es lo que más echan en falta los profesores que han participado en la última edición de la Universidad de Otoño, celebrada por el Colegio de Doctores y Licenciados (CDL) entre el 23 y el 27 de septiembre.
Según el primer avance de esta encuesta, realizada a un millar de docentes de todos los niveles educativos, un 92,62% del profesorado considera ‘muy necesario’ adoptar medidas encaminadas a mantener la convivencia en los centros y evitar los problemas de disciplina entre los alumnos. Tan sólo un 4,04% de los docentes creen que estas medidas son ‘poco necesarias’, mientras que un 2,46% se muestran indiferentes; un 0,35% las considera innecesarias y un 0,53% considera que el establecimiento de medidas contra la indisciplina sería ‘muy negativo’.
Sí a la reforma
Como ya reflejaran los últimos informes de Álvaro Marchesi o la encuesta al profesorado realizada antes del verano por ANPE, los docentes están de acuerdo con Pilar del Castillo en la puesta en marcha de medidas como los itinerarios, el establecimiento de pruebas de diagnóstico a lo largo de todo el sistema educativo, la Reválida o la supresión de la promoción automática.
El profesorado aplaude además el conjunto de proyectos de ley para reformar el sistema educativo que está desarrollando el MECD, ya que un 43,02% cree que es ‘aceptable’, frente al 20,84% lo define como ‘mal’, y de manera más minoritaria un 5,35% cree que el equipo de Pilar del Castillo lo está haciendo ‘muy bien’, mientras un 4,97% opina lo contrario y se decanta por el ‘muy mal’.
Adiós a la Logse
En concreto, el proyecto de Ley de Calidad es calificado de ‘aceptable’ por un 35,81% del profesorado, frente al 21,52% que lo califica de ‘mal’, aunque entre los defensores de la Logse se admite que en nuestro sistema educativo se dan graves deficiencias y es necesario tomar medidas para reducir la alta tasa de fracaso escolar entre los estudiantes españoles, ofrecer una correcta atención a la diversidad, posibilitar la homologación de títulos y estudios con los de los sistemas educativos de los países de la Unión Europea y mejorar el reconocimiento social y las condiciones laborales del profesorado, así como cambiar un sistema de elección del director que ha fracasado por la escasa disposición de los docentes a presentarse como candidatos a ‘director de centro’.
Los docentes valoraron además la actuación hasta ahora de los partidos políticos en el actual proceso de reformas, llevándose la peor parte Izquierda Unida (IU). Las posturas de Partido Popular (PP) y Partido Socialista (PSOE) son consideradas como ‘aceptable’ por un 33,11% y un 34,78% respectivamente.
La reforma de las aulas y las leyes, lema de la edición de la Universidad de Otoño 2002 es por tanto avalada por la mayor parte del profesorado, lo que demuestra de una vez por todas que Pilar del Castillo, pese a lo que diga la oposición, no está tan sola.
José Luis Negro Fernández, presidente del Consejo de Colegios de Doctores y Licenciados: “Apoyamos la Ley de Calidad porque en la Logse hay errores graves”
Decano del Colegio de Doctores y Licenciados de Madrid y presidente del Consejo General de los colegios de doctores y licenciados de España, José Luis Negro, afirmó, durante su comparecencia en la Comisión de Educación del Congreso de los Diputados, que “la necesidad de cambios en la Logse era un clamor del mundo educativo desde hace años. Se identificaban problemas y se pedían soluciones y, por esa razón, nuestra postura es de apoyo al intento de la Ley de Calidad de poner solución a los problemas”.
Sin embargo, Negro también aclaró que “en ningún modo estamos contra la Logse, que apoyamos en su día porque hasta hoy ha sido la mejor ley que hemos tenido en Educación”. Pero “la Ley de Calidad no es una contra Logse”, afirmó, porque no cambia la estructura general del sistema educativo.
Para el decano del Colegio de Doctores y Licenciados de Madrid, “el error más grave de planteamiento de la Logse fue la disociación enseñanza-sociedad, ya que el disfrute de los derechos y las libertades exige la asunción de responsabilidades”. Además, Negro se pregunta cómo puede aprender una persona la exigencia de esfuerzo y trabajo en la vida si, poco a poco, en equilibrio con su desarrollo, no se ha entrenado en el tiempo de la Educación obligatoria.
Pero “la Logse tampoco acertó en su concepción igualitarista del alumnado, en su exagerada apuesta por la comprensividad”, afirmó el decano, para quien “es absurdo y dilapidador del patrimonio cultural el intentar que todos seamos iguales, porque no lo somos”. Por eso, Negro afirmó que “la mayoría de los profesionales apoyamos la diversificación que plantea la Ley de Calidad”.
Este experto de la enseñanza, con más de 40 años de experiencia como docente, calificó de ‘absurda’ la actual confrontación política ante un proyecto de Ley que era pedida desde hace tiempo por toda la comunidad escolar ante los graves problemas del sistema educativo. No obstante, para Negro, “las habas están contadas; se les puede poner una salsa política u otra, pero no se diferencian mucho, y hoy, el PP, está legitimado para poner su salsa como lo estuvo en su día el PSOE”.