“Bajo la palabra libertad, el PP esconde la tendencia a privatizar y a derrochar”

Cree que se ha perdido una oportunidad histórica para la mejora de la Educación en España. La secretaria de Educación del PSOE y portavoz en el Congreso, Cándida Martínez, incide en todo el esfuerzo que ha dedicado su partido para que el PP suscribiera el Pacto.

¿Por qué cree que no se ha producido apoyo político al Pacto?
El apoyo principal que se esperaba era el del PP. De hecho, pienso que se desencadena todo el desacuerdo cuando el PP toma la decisión de no apoyar el Pacto . Se ha trabajado mucho durante mucho tiempo. Y el PSOE ha sido muy generoso en la aceptación de muchas propuestas, en limarlas, en dialogar para intentar llegar a un acuerdo.

Pero tampoco el resto de grupos políticos lo ha firmado.
Antes había un acuerdo en torno a la LOE. Ahora se trataba de ampliar ese acuerdo con el PP. También los otros grupos importan, claro que sí, y yo creo que ha faltado esa generosidad. Pero había una pieza importante en este acuerdo, que era el PP. Y me refiero al PP porque hemos trabajado mucho para que lo suscriba. Lo que ocurre es que cuando se quiere pactar es necesario dialogar, no imponer. Y significa buscar los puntos de encuentro, no aquello que nos separa. Y no ha sido ésa la actitud del PP.

¿Por qué no se han incluido propuestas como la libertad de elección de centros o la enseñanza del castellano?
El PP coloca encima de la mesa algunos aspectos, como los que mencionas, que realmente crean problemas a la hora de llegar a un gran acuerdo, pero no sólo con nosotros, sino también con el resto de los grupos políticos. Y además, sinceramente, esos temas no son problemas cruciales y centrales que tenga la Educación en este país. Los informes nacionales e internacionales nos lo dicen. ¿Cuáles son? El fracaso escolar, el abandono temprano y que nuestra FP no tiene el porcentaje de titulados de otros países de la UE. Ésos son los temas que quería atender este Pacto. Pero, en cualquier caso, en ambas cuestiones, hemos hecho ofrecimientos bastante sensatos, y el PP no ha sido receptivo.

¿Y cómo entiende el PSOE estos temas de la libertad de elección de centros o la enseñanza del castellano?
Reitero que ésos no son problemas centrales. Es que eso es importante tenerlo en cuenta, porque buscamos ahí cosas que nos separan. Y de verdad, a la ciudadanía lo que le interesa es que nuestros jóvenes terminen la Secundaria, el Bachillerato o la FP de Grado Superior, que dominen el inglés y alguna otra lengua extranjera, manejar las TIC, la modernización de nuestro sistema… Pero voy a dar mi opinión. Nosotros no estamos de acuerdo con la libertad de elección de centros entendida como lo hace el PP, de concierto a demanda. Si tienes plazas públicas suficientes en la zona ¿para qué vamos a dedicar el erario público a dejar esas plazas que ya están financiadas y concertar las de un grupo privado que ha decidido montar otro centro en esa zona? ¡Pero bueno! ¿en qué país vivimos? ¿Qué derroche es éste? ¿Qué hacemos con las otras plazas? No tiene sentido. Libertad de elección existe, porque los padres pueden elegir dentro de la oferta que programan las comunidades. Pero que cada grupo monte su centro y se lo tengan que financiar, aunque haya plazas públicas, es un derroche absoluto, no sólo por la situación económica que vivimos, sino que en ningún país occidental de nuestro entorno existe semejante propuesta. Es que debajo de esa hermosa palabra “libertad”, lo que esconden es una tendencia a la privatización y a un derroche de las arcas públicas.

¿Y con respecto al tema del castellano?
El documento planteaba que todos los jóvenes salieran del sistema educativo conociendo perfectamente el castellano y la lengua propia de la comunidad. Cada comunidad tiene que conseguirlo conforme a su estatutos y a sus leyes. Lo que ocurre es que, de nuevo, se ha utilizado el castellano para crear discordia. Ningún informe de los que se han realizado en las comunidades con lengua propia dice que exista un problema de conocimiento del castellano, más allá del problema general de aprendizaje de lengua o de lectura que pueda existir en Aragón, Andalucía, País Vasco, Galicia o Cataluña. Se crea así un enfrentamiento de lenguas, cuando la propuesta del Pacto es superadora. Habla de plurilingüismo, no de bilingüismo. Los jóvenes tienen que hablar castellano, catalán, inglés, francés o cualquier otra lengua.

Pero la LEC sólo reconoce al catalán como vehicular.
Sí, pero el modelo que se utiliza ahora en Cataluña no viene de la LEC. Hay una ley de normalización lingüística del año 1997, y ahí se plantea todo esto. Y en ese momento gobernaba en España el PP y esa ley no se ha recurrido nunca. Es verdad que entonces el PP necesitaba los votos de los catalanes para gobernar. A partir de esa ley es cuando se desarrolla todo este proyecto de enseñanza en catalán, de igual forma que en Baleares, cuando también gobernaba el PP. Crean discordia en un tema que hace unos años ni siquiera planteaban.

REFLEXIONES

• ¿El ministro podría haber llegado a más y el PSOE no le ha dejado?

Es absolutamente falso. Es un discurso del PP para debilitar al PSOE. La relación y el trabajo conjunto entre el Ministerio y el grupo socialista ha sido permanente desde el principio hasta el final.

• ¿Era necesario el Pacto?

El Pacto hubiera servido para dar esa estabilidad al sistema educativo que la sociedad española tanto nos ha pedido. También para mejorar, porque es verdad que nuestro sistema educativo tiene serios problemas como el fracaso o el abandono. Y también para afrontar con ambición de país los retos educativos para el siglo XXI.

• El PP dice que intentará un Pacto si llega a gobernar.

El PP ha tenido una ocasión inmejorable. En fin, siempre hay que dejar las puertas abiertas, pero después de esto, yo creo que tiene poco acreditada su voluntad de pacto.

• ¿Era suficiente el apoyo al profesorado?

En el texto existe una apuesta por el profesorado tan evidente que todas las organizaciones sindicales están de acuerdo con el texto, tanto las de Pública como las de Privada.