Los empresarios detectan falta de motivación en los titulados de FP

Una encuesta de las Cámaras de Comercio realizada en octubre de 2009 sobre la valoración que hacen los empresarios de cerca de 5.000 empresas de los titulados de Formación Profesional que acuden a trabajar es de 5,6 sobre 10. Las empresas de 250 o más empleados son las que mejor valoran la FP reglada, con un 6,3. Y por sectores de actividad, es en la hostelería y el turismo donde se da una mayor valoración, con un 5,8.

Entre las principales carencias detectadas por las empresas destaca la falta de motivación de los trabajadores procedentes de esta etapa educativa y la falta de adaptación de la oferta formativa a las necesidades de las empresas. El director del IES “Francisco García Pavón”, Vicente García, un centro integrado de FP de Tomelloso (Ciudad Real), cree que esta desadecuación es debida a que las administraciones públicas planifican la oferta de centros en función de criterios políticos y no de acuerdo con las necesidades formativas o las demandas del mercado laboral. Además de la desmotivación, los empresarios señalan la escasez de profesionales cualificados como otra carencia de la FP. En cambio, ya sólo un 17% también cree que las administraciones no dan a la FP la importancia que requiere o que ésta no tiene prestigio en la sociedad. Un 10% de los encuestados no detecta carencias.

Más del 50% de los empresarios encuestados señala que incrementar las prácticas mejoraría el desempeño de los futuros trabajadores, algo en lo que coincide con Vicente García, que cree que el módulo de Formación en Centros de Trabajo (FCT) debería aumentarse e intercalarse con el período formativo.

Para las empresas no sólo es baja la motivación sino que un 25% de las empresas detecta carencias formativas básicas en los titulados. Empresas de servicios como consultoría, transporte u ocio, y las del sector industrial, consideran en mayor proporción que los programas formativos de FP no se adaptan a los requerimientos de la empresa.

Más allá de las competencias técnicas, los empresarios también echan en falta otras habilidades como el uso de idiomas, la capacidad de gestión de equipos o la negociación, mientras que el 16,2% reforzaría los conocimientos relacionados con la cultura empresarial (gestión, carácter emprendedor…).

Plan europeo de FP
Precisamente para mejorar la calidad de la FP, la Comisión Europea presentó el 9 de junio un plan para el periodo 2010 a 2020 para impulsar el número de personas que apuestan por estudiar Formación Profesional en Europa. Este programa se presenta durante el último mes de presidencia española de la Unión Europea. Un periodo en el que la Educación y la formación han pasado a desempeñar un papel relevante en el contexto europeo. De hecho la Educación ha sido incluida por primera vez como una de las prioridades del Consejo Europeo y será una de las políticas por las que la Unión Europea apostará dentro de la Estrategia Europa 2020.

En el Consejo de Ministros del pasado 28 de mayo, el ministro de Educación, Ángel Gabilondo, presentó un informe sobre la situación actual de la Formación Profesional en España, en el que se apuntaban medidas para impulsar y potenciar estos estudios en nuestro país. Unos estudios que han visto incrementar el número de estudiantes en un 17% desde 2007, pero que siguen por debajo de la media de la OCDE.

En el curso 2007-08 eran 500.000 los estudiantes de FP y 86.000 más en 2009-10. Con este aumento se modifica en parte la tendencia española de una mayor demanda de estudios de Bachillerato.

Sin embargo, la diferencia con la media europea es de diez puntos en FP de Grado Medio. Sólo el 35% de los estudiantes de nuestro país opta por esta formación, según el informe ministerial. Además, España sigue por debajo de la media de la OCDE de titulados en enseñanzas postobligatorias, un 72% frente a un 83%. Según este organismo, es necesario que el 85% de los jóvenes alcance, al menos, una cualificación media de Bachillerato o de FP de Grado Medio.

El informe de Educación define las líneas para alcanzar estos niveles, que requieren un nuevo diseño de la FP sustentado sobre las nuevas tecnologías y vinculada al entorno productivo. Un sistema de evaluación de resultados, el desarrollo de pasarelas con la Universidad y la puesta en marcha de un tipo de centro diferente, con “departamentos de inteligencia estratégica”, la evaluación y acreditación de las competencias y la actualización de títulos. Hasta ahora se han completado 41 títulos (de 120) y 411 cualificaciones profesionales (de las 750 que hay).

Conclusiones

–Por sectores
La valoración que realizan las empresas de la FP reglada en una escala de 0 a 10 es de 5,6. Las empresas del sector comercio y de la hostelería son las que mejor valoran la Formación Profesional, con una media de 5,8. Las empresas del sector industrial son las que menor valoración otorgan a la FP, un 5,1.
–Carencias de la FP
La principal carencia que detectan las empresas es en la motivación de los titulados que acceden a un puesto de trabajo. Un 34,3% de las empresas señalan este problema. La segunda carencia más importante es la falta de adaptación de la oferta formativa a los requerimientos de la empresa (28,1%). Casi un 25% de las empresas advierte carencias formativas básicas en los titulados.
–Mejora la competitividad
Más de un 50% de las empresas considera que incrementar las prácticas para que la formación sea más efectiva mejoraría el trabajo de los alumnos de FP. Un tercio de las empresas piensa que elevar el nivel de formación técnica y dotar al profesorado de formación continua podría ser beneficioso para mejorar la competitividad. Casi un 22% considera que deben mejorarse las habilidades empresariales transversales (idiomas, gestión de equipos, negociación, etc.).