Ustea pide anular el Plan de Calidad hasta el fallo del Supremo
El sindicato Ustea ha pedido al Tribunal Superior de Justicia de Andalucía que ejecute y haga efectiva en su totalidad la sentencia de 8 de julio pasado por la que anulaba provisionalmente el Programa de Calidad y Mejora de los rendimientos escolares de la Junta por el que los profesores acogidos a él cobran 7.000 euros. Ustea justifica esta petición en que el Alto Tribunal es casi seguro que anulará definitivamente el plan y sus incentivos por lo que sería rechazado el recurso de casación interpuesto por la Junta y habría que esperar a que se pronunciase el Tribunal Supremo.
Por su parte, la Junta, a través del consejero de Educación, Francisco Álvarez de la Chica, insiste en seguir adelante con el plan incluyendo las consideraciones realizadas por el TSJA y las que hagan los sindicatos, directores y padres.
Estas modificaciones se harían una vez que la sentencia de dicho tribunal sea firme. En declaraciones a Europa Press, el consejero señaló que la sentencia “no va en detrimento” del fondo del Plan de Calidad y por eso la Consejería sigue con la intención de “hacer un proceso lo más objetivo posible que incentive a los profesores que están más motivados y que sirva de atracción a los que lo están menos”. Una de las modificaciones que se introducirían sería la intervención externa de los inspectores para que validen y verifiquen cuáles son los rendimientos escolares.
Atribuciones del director
Por otra parte, el Juzgado nº 5 de lo contencioso-administrativo de Granada ha anulado la resolución de la dirección del IES “Aricel” de Albolote por la que se atribuía competencias en torno al cumplimiento de la jornada y horarios de los profesores. El director publicó un aviso por el que demandaba que las justificaciones de ausencia del profesorado debían contener las horas en que la asistencia al médico se hubiera producido. El tribunal señala que los directores carecen de atribuciones legales para establecer el contenido de las justificaciones de las ausencias de profesores.
Según el sindicato APIA, “la sentencia adquiere, si cabe, una especial relevancia en estos momentos, cuando acaba de entrar en vigor la nueva reglamentación orgánica de los institutos, que dota a los directores de un poder sin precedentes hasta ahora”. APIA añade que “si con la anterior normativa, mucho más respetuosa con los derechos y libertades de los profesores, algunos tuvieron la tentación de ejercer de mandarines, no queremos ni pensar a qué se atreverán, ahora que el ROC ha puesto en sus manos poderosas herramientas para acabar con la libertad de cátedra, sometiendo a la profesión docente a sus caprichosos dictados”.
Precisamente el sindicato APIA ha presentado un “manual del perfecto resistente” donde detalla las medidas contenidas en los ROC así como la reacción que todo profesor debe ejercer en relación a las nuevas responsabilidades en actividades complementarias, reuniones no contempladas en el horario personal, pruebas de diagnóstico, programas de gratuidad de libros, guardias de recreo, condiciones de seguridad y salud y requisitos mínimos de los institutos.