Recortes, los mercados y la JMJ, todo junto

A sabiendas de que algunos de nuestros lectores se molesten, opino que el debate de los recortes está intoxicado. Es mi conclusión tras seguir minuciosamente el prendimiento y propagación de la protesta en twitter este verano. Entre los miles de tuits hay mucha consigna y poca propuesta, demasiado eslogan y poco argumento. Probablemente 140 caracteres no dan para más, es cierto. Pero he leído críticas razonadas al recorte de personal trufadas con ataques a los empresarios; quejas fundadas por el incremento de trabajo que se les viene encima mezcladas con críticas a los concertados, a los mercados, a la expulsión de los indignados de Sol y a la visita del Papa. Así, todo junto.

No es bueno para los intereses del profesorado de la Pública que se les vea escorados a la izquierda. Es la coartada que necesita la derecha. Hubiera sido más eficaz en orden a minimizar los recortes haberse centrado en lo laboral.
¿Por qué, entonces? Porque realmente es poca cosa este recorte y no se hubiera entendido tanta algarabía. Porque es cierto que el profesorado va a ir más apretado, pero como casi todos desde la crisis. Porque es cierto que en Madrid más de 3.000 interinos van a perder su trabajo pero también lo es, por ejemplo, que 2.700 periodistas han perdido el suyo, etc. Y, como no se hubiera entendido, es mejor decir que la derecha quiere desmantelar la Educación pública.