fbpx

“Los profesores son agentes de cambio que hay que potenciar”

El proyecto educaBarrié es la última iniciativa con la que la fundación gallega quiere apoyar al sistema educativo a partir de un enfoque basado en el concepto 2.0, interactivo y colaborativo.

José Mª de MoyaLunes, 19 de diciembre de 2011
0

Javier López Martínez llegó a la Dirección General de la Fundación Barrié hace tres años. Con el objetivo de maximizar el impacto de la actividad de la institución en la sociedad, el plan estratégico elaborado por su equipo gira en torno a la Educación. Tras algo más de un año de trabajo, la fundación ha presentado educaBarrié, un canal con el que pretenden llegar a la comunidad educativa, las familias y la sociedad en general con experiencias innovadoras. Un espacio abierto en el que volcarán su actividad en las áreas fundacionales (patrimonio y cultura; Educación e investigación; y acción social), pero también lugar de encuentro para que profesores y alumnos difundan sus proyectos.

¿Cuál es el origen y trayectoria de la Fundación Barrié?
Nace de la idea de un emprendedor nato, Pedro Barrié de la Maza, quien creía que la Educación de las personas es la clave del desarrollo económico de un territorio. Creó las escuelas de Arquitectura, la de ingenieros industriales en Vigo, y un programa de becas que ha concedido más de 14.000. En torno al 40% del presupuesto acumulado de la fundación se ha aplicado a Educación. Nuestra función es crear oportunidades y apoyar el talento.

¿Se había perdido el acento en la Educación antes de su llegada hace tres años?
Probablemente se había diluido, pero ahora es una apuesta muy nítida por el talento, las personas y el conocimiento. Ahí se enmarca una iniciativa que acaba de nacer, educaBarrié, que incluye todo lo que hace la fundación en patrimonio, cultura, acción social e investigación en Educación. Queremos que todo eso llegue a la comunidad educativa de una forma natural, fácil. Queremos influir en los currículums educativos a través de las actuaciones de la fundación con un concepto 2.0, que no de web 2.0.

¿A qué se refiere?
Tomando el término de internet, significa que a los usuarios hay que convertirlos en partícipes del proceso como diseñadores y productores, no sólo como consumidores y usuarios. En educaBarrié contamos con un gabinete de maestros en el que hay un grupo de profesores de los más innovadores de Galicia.

¿Cómo se enmarca educaBarrié en el contexto en el que hay conciencia de que el problema educativo va en aumento?
educaBarrié es un paso, pero no el único que daremos en esta dirección de intentar mejorar el sistema educativo. Estamos en conversaciones con la Fundación Empieza por Educar, y también con otras iniciativas educativas exitosas que pueden ayudar a mejorar las habilidades de los profesores en el aula. Y también nos planteamos acciones con los alumnos, como el programa de becas High School; o un proyecto de crear un campus de liderazgo y de excelencia con la idea de potenciar las competencias de los chavales más allá de lo que suele ser tratado en los currículums educativos. Si queremos personas tolerantes, solidarias, con visión de mundo, esto hay que trabajarlo.

¿Cree que en virtud de la equidad se ha descuidado la excelencia?
Nuestra definición de excelencia es talento más valores. Hemos de huir de identificar el talento sólo en sentido académico. Se trata de detectar todos los matices del talento y añadir los valores.

¿Hay que cambiar la mentalidad en la relación entre lo público y lo privado?
Una fundación, por definición, tiene que ser pionera, abrir caminos. Nosotros lo llevamos en nuestro ADN, y a veces se pueden promover proyectos que pueden etiquetarse como transgresores o que rompen el statu quo. En el programa Empieza por Educar y Teach for All vemos muchos valores positivos. Y probablemente sólo es posible arrancarlo con la colaboración privada.

¿Pero se puede considerar intrusismo?
Cuando planteamos un proyecto, no obligamos a nadie. educaBarrié es un ejemplo; y también en investigación financiamos a riesgo en proyectos de las universidades. Si hay éxito, la fundación tiene derecho a un porcentaje de los resultados para seguir financiando más investigación.

A veces son unos pocos los que, con apoyo sindical, lideran movimientos de oposición.
Nosotros no hacemos estas cosas en contra de nadie sino por convicción de que podemos ayudar a mejorar la Educación. Y partimos de la base de la sociedad civil. Con educaBarrié, los que más colaboran ahora son los profesores más innovadores, que ven como esto les hace más fácil el trabajo y también les ayuda a difundir lo que hacen en el aula. Si las cosas se hacen bien, lo normal es que las barreras se venzan.

Respecto al mundo anglosajón, ¿el sistema educativo español peca de rígido?
Los exámenes no son la única forma de evaluar y controlar a un alumno. En vez de dar conocimientos con una clase y un discurso cerrados, hay que despertar la actitud crítica de los alumnos, que busquen más por su cuenta, que emprendan, en el sentido más amplio del término. Son elementos que podemos aprender del entorno anglosajón y mejorar nuestro sistema educativo, y eso no es denostar el nuestro, porque hay cosas que ellos tendrían que aprender.

¿Y cuál es el rol del Estado y de la sociedad?
Si somos capaces de educar ciudadanos con valores, si la gente asume su cuota de responsabilidad, estaríamos actuando más. El Estado no es la única forma de resolver problemas. La sociedad civil tiene una capacidad de respuesta muy poco desarrollada en nuestro entorno; y lo privado tiene unas connotaciones negativas que hay que superar.

Vinculadas particularmente a la Educación.
Se ha jugado con el estereotipo de colegio privado y público. Pero a eso me refiero cuando hablo de que la sociedad civil –una asociación de padres, por ejemplo– puede resolver problemas de la Educación pública.

¿Es más importante la tecnología o la Educación emocional?
Las tecnologías son un soporte, un recurso, que pueden hacer las cosas más fáciles, pero si no se utilizan bien puede ser que aporten poco valor o incluso lo reduzcan. Es más importante desarrollar el espíritu crítico, las habilidades emprendedoras, la capacidad de ser asertivo, de trabajar en equipo, de comunicación… Son competencias transversales y aplicables a cualquier ámbito de la vida.

Rubalcaba dijo en la campaña, ante un grupo de profes, que el sistema lo que hacía muy bien era formar funcionarios…
Si ese fuera el diagnóstico del sistema educativo, estaríamos fatal. Los profesores son agentes de cambio que hay que potenciar, porque además pueden arrastrar a otros.

Pero en España el 70% de los estudiantes aspiran a ser funcionarios….
Es un problema social. El principal freno del emprendimiento es la valoración social de la estabilidad, de la seguridad. No es ni la financiación, ni las trabas burocráticas, ni las vocaciones emprendedoras. Aquí tampoco mostramos los casos de éxitos cercanos, que pueden ser mejores ejemplos.

Si tuviera la ocasión de tomar ahora una decisión de Gobierno, ¿cuál tomaría en el ámbito educativo?
Si fuéramos capaces de impregnar todo el sistema de la Educación por competencias y cambiar la forma de dar clase, yo invertiría dinero. Ya no digo no recortar, sino invertir más. Quizás sea la inversión con un mayor efecto multiplicador aunque genere resultados a más largo plazo.

¿Y como sociedad civil qué impulsaría?
Además de reivindicar, hay que dar un paso al frente para construir. Nosotros queremos ser provocadores. Cuando montamos cosas como educaBarrié, o cuando vemos proyectos como Empieza por Educar, queremos provocar. No queremos que deje indiferente a nadie.

0