Reciclar y adaptar los conocimientos al ahora
En las aguas del siglo XXI, con la revolución tecnológica global, diferentes factores novedosos han disparado el caudal. Existen dos actitudes: bucear como locos, muriendo en la búsqueda por falta de oxígeno, o dejarnos flotar, aprovechando al máximo las ventajas de la marea.
Con esta comparación, Pablo Rivas, autor de Aprender a desaprender, apuesta por aprovechar las ventajas de la marea partiendo de la necesidad de derrumbar viejos paradigmas y rutinas para reciclar los conocimientos y adaptarnos a los nuevos tiempos. Pero ¿hasta dónde tenemos que desaprender? La respuesta: hasta donde comience la tarea de reaprender.
La revisión y la reeducación, ahora más que nunca, es una necesidad de la formación y actualización continua. La tendencia de las metodologías educativas apunta hacia un aprendizaje personalizado y activo. Un modelo en el que el maestro plantea grandes proyectos y problemas que resolver y los alumnos alcanzan conclusiones, aplicando sus conocimientos al mismo tiempo que los aprenden.
La revolución digital está derribando los paradigmas del sistema educativo tradicional y proporciona las claves de la nueva Educación que permitirán abrir la mente, romper con viejos esquemas y mantener la motivación y la capacidad de aprender cada día.