La oración, inherente a la tradición católica, actúa como conexión entre el fiel y lo divino, y como herramienta con la que calmar el alma en tiempos de tribulación. Sin embargo, en la actualidad, vemos que los adolescentes han perdido interés en la espiritualidad y han comenzado a distanciarse de este rito tan esencial. Aquí te brindamos algunas ideas para que, como docente, puedas animar a rezar a los jóvenes.
JMJ, un ejemplo inspirador para la formación religiosa juvenil
Hakuna en las clases de Religión para jóvenes
San Juan de la Cruz, un santo del que aprender