Dificultad para aprender fechas de memoria

Autor: padresycolegios.com

Tengo mucha dificultad para aprender de memoria fechas y lugares. Ahora, en mi opción, la Historia es sólo una asignatura, las reglas mnemotécnicas me ayudan un poco, pero supongo que no será suficiente para toda una carrera. ¿Podría superar este pequeño problemilla?

Lorena García. Madrid
 

Estimada Lorena, cuando queremos recordar algo, nuestro sistema de memoria no inicia una investigación lineal. Alcanza distintas direcciones de forma simultánea y recoge la información a partir de diversas redes de los circuitos interconectados del cerebro. Para utilizar este proceso de asociación como apoyo a la memoria, debemos vincular de forma consciente e intencionada el nuevo bagaje informativo al ya existente. Cuantas más conexiones tengamos entre los conceptos, mayores serán nuestras estrategias para recordar.

La Historia es mucho más que lugares, fechas y nombres. Relacionar hechos y comprender que se trata de fenómenos humanos puede ayudarte. Haz una prueba: toma un texto histórico, diseña un cuadro sinóptico que pueda servirte como ayuda y transfórmalo en una especie de película mental o anécdota, imaginando los lugares, la psicología de cada personaje, las vestimentas, el clima, las características geográficas de donde tuvo lugar el hecho y todo lo que dé dimensión humana; de este modo puede resultarte más fácil y ameno recordar lugares y fechas significativas.

Desde aquí te animamos a intentarlo y ya verás cómo este pequeño problemita que nos planteas poco a poco va desapareciendo. Mucha suerte.

Problemas de espalda en niños de 13 a 15 años

Autor: padresycolegios.com

Según ha informado el Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid, más de la mitad de los escolares de entre 13 y 15 años sufren problemas de espalda. El porcentaje de afectados de estas edades es del 50% en niños y de hasta un 70% en niñas. Por otra parte, más del 40% de niños menores de 11 años también sufre este tipo de patologías. Las causas principales de las dolencias son el mobiliario inadecuado, la carga excesiva de las mochilas y el sedentarismo.

Colegios para niños 10

Clases de 12 alumnos, 25 deportes y evaluación continua del profesorado. En «Andover» y «Exeter» (EEUU), como se conoce a dos de los colegios más prestigiosos del mundo, se imparte clase para los mejores, con inmejorables condiciones. Gracias a las becas Kemper, todos los años un niño español puede disfrutar de un curso allí.

Autor: LOLA Gª AJOFRÍN

Cuando la profesora española Myriam Medrano llegó a “Andover” (Massachusetts) en 1992 para dar clase de Literatura y Cultura española, “no daba crédito”, recuerda emocionada en su despacho del Colegio de Fomento “Las Tablas Valverde” de Madrid, donde ahora imparte clase después de sus andanzas por los Estados Unidos. Más de 150 edificios, 18 canchas de tenis, dos pistas de patinaje sobre hielo, piscinas, gimnasios, teatro, iglesias, museos y  biblioteca eran algunas de las facilidades de las que durante seis años –“entre idas y venidas”, aclara– disfrutó en su destino norteameriano, el colegio “Phillips Academy Andover”, un campus del tamaño de unos 200 campos de fútbol accesible para los mejores de entre los mejores.

Los presidentes George Bush (padre e hijo), el premio Nobel y codescubridor del ADN James Watson, el actor Jack Lemmon y un largo etcétera de políticos, científicos, músicos o deportistas figuran en una lista de exalumnos que bien podría ser la de los más poderosos y ricos de dentro y fuera de los Estados Unidos.

PARA MENTES ÚNICAS
Pero el secreto del éxito del que está considerado uno de los mejores colegios del mundo no son los 26.000 euros de matrícula anual que permiten al “Phillips Academy” ofrecer 500 trabajadores –entre profesores, psicólogos, coordinadores y personal de mantenimiento– para 1.100 estudiantes, clases de 12 alumnos y hasta 25 deportes. “La clave –explica la profesora Medrano– es la calidad de su materia prima”. En “Andover” captan a las mentes más privilegiadas del planeta de entre 3º ESO y 2º de Bachillerato y las preparan para entrar en Harvard, Yale o Stanford –las univesidades más prestigiosas-. 

Alexander Heifner, de 17 años, es uno de sus alumno. Compagina su tiempo como estudiante adolescente por las mañanas con el de analista político en una cadena de televisión por las tardes. “Era curioso verle preocupado por sus ejercicios sobre el pretérito imperfecto en clase y al rato, junto a Obama, hablando en televisión con término políticos incomprensibles”, recuerda Myriam.

Pero la española no sólo tuvo alumnos modelo en su aula. El hecho de descubrir fumando a las hijas de un famoso político venezolano casi le cuesta a las niñas la expulsión y a ella un disgusto. “La rigidez de sus normas también es insignia del colegio”, explica la profesora. “Dar una calada a un cigarro, probar una gota de alcohol o hablar en un examen suponen el billete de salida automático”, aclara. “Y, de hecho, los niños firman un juramento en el que aseguran que no van a copiar”.

Exigencia, excelencia y rectitud, aunque con una matricula no apta para todos los bolsillos.  Para que sea el nivel académico y no el económico el que determine el ingreso en el centro, “Andover” concede numerosas subvenciones a los alumnos más brillantes. Cada año, un niño español, junto a un alemán, un francés y un italiano, tiene la posibilidad de disfrutar de un curso allí gracias a las becas Kemper.

“NO SÓLO ES EL PRESUPUESTO, SON LAS TÉCNICAS QUE USAN”
Para la profesora española Myriam Medrano, el presupuesto no es lo único que permite la excelencia a “Andover” y a su equivalente “Exeter. “Se puede aprender de varias de sus técnicas”. 
• NADIE SE DA LA ESPALDA.  En “Exeter” no hay pupitres, sino que los niños se sientan entorno a una mesa ovalada.  “Es lo que se conoce como Harkness Table –mesa de escucha–, una técnica que facilita la interacción”, aclara. En “Andover” se utiliza el mismo sistema, aunque son las sillas las que se colocan alrededor de la clase.
• AGRUPACIÓN. A los niños no se les agrupa por edades, sino por desarrollo intelectual y en cada  asignatura en un nivel distinto.
• EFICIENCIA. No se espera a que el niño suspenda, se interviene antes; se potencian las habilidades artísticas y el deporte; y a los profesores se les evalúa cada trimestre.

 

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El 40% de los niños tiene TV en el cuarto

Se ha publicado recientemente un estudio sobre la infancia en España a cargo de Fernando Vidal y Rosalía Mota, y patrocinado por la Universidad Pontificia Comillas, el Movimiento Junior y la Fundación SM. El trabajo recoge datos interesantes no sólo para conocer el estado de la familia en España, sino para ayudarnos a comprender mejor a nuestros hijos.

Autor: José M. Lacasa

Desgraciadamente, el curioso sistema de muestreo utilizado –un colegio por ciudad, un aula por centro– invalida o pone en cuestión algunas de las conclusiones: el estudio tiene un claro sesgo hacia el mundo rural, y además los errores son más abultados de lo que dicen los autores. Pero, una vez adoptadas estas prevenciones, vamos con el informe.

Muchos de los datos sobre la composición de las familias son similares a los de otros estudios. En este, el 99% de los niños entre 6 y 14 años viven con al menos uno de sus padres, el 86% con los dos y el 14% con uno. Además, el 15% de los niños no vive con ningún hermano en el hogar, un 55% tiene otro hermano y el 30% restante vive con dos o más.

ABUELOS

Pero los datos más destacados del informe, con relación a la familia, hacen referencia a los abuelos: no sólo es que el 96% de los niños tenga algún abuelo, o que un 14% de los niños –entre 6 y 14 años, edades objeto del estudio– vive con alguno, sino que el 79% ve a algún abuelo todas las semanas, y además –a pesar de que los suelen ver muy a menudo– el 86% de los niños entre 6 y 11 años, y el 70% entre 12 y 14 querrían verlos más.

No es de extrañar: más del 60% juega o se divierte con sus abuelos cuando está con ellos, y un 51% de los niños entre 6 y 11 años declaran que sus abuelos les dan todo lo que quieren (todavía un 43% entre los 12 y los 14 años lo admiten). Ya se sabe: los padres para educar, los abuelos para malcriar. Un contrapeso importante que tiene también una vertiente educativa fundamental: el 45% de los menores entre 6 y 11 años les cuentan a sus abuelos los problemas importantes, y lo continúan haciendo un 30% de los preadolescentes (12-14 años).

PROBLEMAS ESCOLARES
El estudio confirma que los problemas en el colegio tienen un ámbito bastante reducido, y sobre todo identifica un perfil de niño con más riesgo de ser maltratado o de tener otros problemas con sus compañeros en el colegio. Para empezar, sólo el 1% de los chicos y un 0,5% de las chicas dice no tener amigos en la escuela, aunque ya un 8% entre 6 y 11 años y un 5% entre los preadolescentes dice sentirse solo en la escuela.

Además, un 14% de los pequeños y un 10% de los mayores piensan que ningún compañero los defendería en la escuela si fueran agredidos. De hecho, el 83% de los niños entre 12 y 14 años dice que nadie les pega en la escuela, por un 62% entre los 6 y los 11 años, aunque los casos de acoso sistemático se reducen a un 4% entre los más pequeños y a un 1% entre los mayores. Aún así, un 23% de los niños entre 6 y 11 años dice que le pegan “algunas veces”.

Pero lo que sí tiene una presencia abusiva en la vida de nuestros hijos son los cacharros electrónicos para el entretenimiento: televisión y consola. Un 70 % de los niños ve continuamente la televisión los fines de semana, mientras que un 23% de los más pequeños y un 57% de los mayores tiene un consumo elevado –“toda la tarde”– de TV los días lectivos. Lo que es peor: a pesar de que los datos indican que hay pocas cosas peores para el rendimiento escolar de los estudiantes que disponer de una televisión en el cuarto, ya la tiene el 40% de los menores. Por contra, sólo la mitad de los menores lee diariamente. Para rematar, el informe dice que “hay más preadolescentes que cuando llegan a casa van a usar un videojuego que los que van a leer”.

OTROS DATOS
• Según los datos del Informe PISA 2003, nada afectaba más a los alumnos de 15 años que tener una televisión en su cuarto: hasta un curso de retraso en conocimientos se encontraba entre los alumnos que tenían TV en el cuarto y los que no los tenían.

• La videoconsola afectaba en menor medida, pero también tenía un impacto importante: alrededor de medio curso de desventaja –medido en competencias o habilidades matemáticas– tenían los alumnos con video consola frente a los que no la tenían.

• Numerosos estudios indican que ser un lector habitual suele ir acompañado con ausencia de problemas de rendimiento escolar.

• No todo se puede controlar, pero parece evidente la línea a seguir por los padres.

 

Niños fuera de juego

Basta con acercarse al APA de cualquier colegio y preguntar cuáles son las actividades extraescolares más demandadas. La respuesta es unánime: padres e hijos prefieren el deporte. Sin embargo, como ha denunciado Save the Children en un reciente estudio, el deporte infantil entraña riesgos cuando se lleva al extremo para convertir a los hijos en pequeños atletas.

Autor: JOSÉ ANTONIO MÉNDEZ

Unas semanas después de que Rafael Nadal ganase el trofeo Roland Garros, las academias de tenis de toda España recibieron un auténtico tsunami de inscripciones infantiles. Ajenos a los sacrificios que impone el deporte profesional, miles de niños sueñan con ser como el tenista mallorquín para poder dedicarse en cuerpo y alma a un juego que les encanta. Sin embargo, cabe preguntarse si los padres aspiran a que sus hijos emulen a Nadal por el placer de jugar, o si contemplan también motivaciones como el éxito, el reconocimiento y, por qué no, el dinero. Los enormes beneficios del deporte para los niños y adolescentes esconden un riesgo que puede llevar a situaciones inimaginables, especialmente en determinados países. Un peligro que llega cuando lo que comenzó siendo un juego se convierte en una obsesión para padres y entrenadores, dispuestos a crear un atleta de competición donde sólo hay un niño.

Según ha recordado en su informe Niños en competición la ONG Save the Children, “el deporte beneficia a los niños porque ofrece bienestar y enseña autodisciplina, trabajo en equipo, liderazgo, cooperación, la habilidad de compartir, manejar el estrés y competir. No obstante, a los niños involucrados en el deporte de competición a menudo se les exige un entrenamiento que va más allá de sus capacidades físicas y emocionales. Un tiempo excesivo dedicado al entrenamiento puede llevar a una pérdida de experiencias claves en la niñez como la socialización con los amigos y la familia”.

Además, la ONG apunta a que una excesiva práctica del deporte de competición suele conllevar alteraciones en el crecimiento, desórdenes alimenticios como anorexia y bulimia, y trastornos psicológicos, que los podrían convertir en fácil objeto de abusos sexuales. Así, por más que el pequeño pueda apuntar maneras como as del deporte, conviene dejarlo crecer a su ritmo. Sobre todo, porque como señala Save the Children,  “antes de alcanzar los 6 o 7 años, el niño no puede comprender el concepto de competición; y los niños menores de 9 años son incapaces de diferenciar entre el concepto del esfuerzo y de capacidad, por lo que creen que ganar sólo se puede conseguir por esfuerzo, y que perder es consecuencia de no intentarlo lo suficiente”.

Y a veces, las motivaciones de los pequeños deportistas son demasiado imperiosas: padres que vuelcan sus esperanzas económicas en los hijos, contextos sociales deprimidos de los que se quiere huir, presiones de los entrenadores… La ONG destaca que “el 70% de jóvenes atletas resulta en gran parte beneficiado por el deporte de competición, pero el 20% vive situaciones de riesgo y el 10% tendría algunos de sus derechos violados”, y señala prácticas especialmente arriesgadas como la gimnasia rítmica y artística, el vaivén de los fichajes en las categorías inferiores de los clubes de fútbol, y otros deportes tan esperpénticos como el boxeo infantil de Tailandia o las carreras de camellos.

CIFRAS Y NOMBRES
• LESIONES. La gimnasia rítmica cuenta con una de las tasas más altas de lesiones dentro de los deportes femeninos. En Reino Unido, 2.600 gimnastas menores de 16 años acuden cada año al hospital con lesiones provocadas por la gimnasia como rotura de huesos, torceduras, esguinces o dislocaciones.

• TRASTORNOS ALIMENTARIOS. Un 15% de las gimnastas corren el riesgo de padecer anorexia o bulimia, y se han producido casos como el de la gimnasta Christy Henrich, que murió a los 22 años como consecuencia de la anorexia. A veces estos trastornos se dan para tratar de evitar el proceso natural de convertirse en adultos y mantener una figura aniñada y delgada.

• FÚTBOL SIN LEY. En España hay casi 350.000 jóvenes de entre 7 y 17 años que se entrenan en clubes profesionales de fútbol, a pesar de que sólo el 4% triunfa. Según la ONG, proliferan los adolescentes de Suramérica y África que acuden a Europa con falsas ofertas deportivas, o con durísimos contratos de exclusividad por parte de los clubes. Además, denuncia que este sistema es el causante de casos como el de Bernard Bass, de 17 años, que viajó a Francia desde Guinea Bissau, previa escala en Tenerife –y por cayuco–, y tras no pasar una prueba con el equipo Metz, terminó viviendo en las calles.

Accede al informe completo de Save the Children pinchando aquí

Se presenta el libro "Retos del siglo XXI para la familia"

Autor: padresycolegios.com

La recomposición de las estructuras socioeconómicas que se fraguó durante la pasada centuria han consolidado ya para el siglo actual un contexto radicalmente distinto al de hace unas décadas en el que se le presentan a la familia nuevos desafíos. Una reflexión profunda sobre el significado e implicaciones de éstas es lo que plantean Remigio Beneyto, Juan Manuel Llopis y Magdalena Torrero en el libro Retos del siglo XXI para la familia, que ha publicado la Universidad CEU San Pablo.

Responsabilidad compartida

Según una encuesta realizada por la Fundación Hogar del Empleado y el Instituto IDEA, el 42% de los profesores cree que los padres se desentienden de la educación de sus hijos. Y es que la buena relación entre padres y escuela no debe reducirse al día de la inscripción. Evitar esta situación puramente cordial pasa por tomar conciencia de la importancia de una buena comunicación y llevarla a cabo.

Autor: Zaida PÉREZ DE ARANDA

El 41% de los padres afirma haber mantenido sólo una o dos entrevistas con los tutores o con alguno de los profesores de su hijo a lo largo del curso, y hay un 9% que no se ha entrevistado nunca con ninguno de ellos. Estos datos se desprenden de un estudio realizado por el Instituto Nacional de Calidad y Evaluación sobre la frecuencia con que los padres se comunican directamente con los profesores. Pero lo cierto es que cuanto más se implican los progenitores, mayor es la autoestima de los niños y mejor rendimiento escolar tienen. Por eso, el portal Entre Padres de EducaRed (www.educared.net/entrepadres) dedica el monográfico de este mes de octubre a la relación padres-profesores, con consejos para ambas partes y especiales sobre Ampas y tutorías.

La relación entre padres y docentes a menudo resulta complicada, ya sea por la dificultad de sincronizar la agenda laboral de los padres con el horario de las escuelas, o por la desconfianza que muchos padres predisponen en las reuniones o tutorías con los profesores de sus hijos. Sin embargo, una comunicación fluida entre ambos ayuda a tener la información de cuáles son los objetivos que se pretenden conseguir, de los métodos que se utilizan y del modo en que se desarrollan los procesos formativos y educativos.

Se trata pues de compartir responsabilidades y trabajar conjuntamente de una forma coordinada en los siguientes aspectos educativos: enseñanza de valores, normas y costumbres; desarrollo de habilidades para la vida; educación en destrezas básicas para el aprendizaje, y transmisión de normas y responsabilidades.

No obstante, los expertos recomiendan implicarse en la escuela desde un término medio, no pasarse por un extremo ni por el otro. Esto significa estar en contacto con los profesores, pero sin pretender estar un día sí y otro también requiriendo información del profesor sobre cómo va nuestro hijo, porque puede resultar agotador. 

CONSEJOS
Algunas pautas para los padres para conseguir una buena comunicación son:
1. Considerad al tutor o profesor vuestro aliado: escuchadlo con atención y no le contradigáis a la primera. Muchos tutores cambian su punto de vista si ven en los padres una complicidad y una actitud positiva hacia su labor educativa.
2. Demostrad un interés real: utilizad lo que sabéis de vuestro hijo para demostrarle que estáis al tanto de cada día en el colegio, pidiéndole consejos, orientaciones.
3. Interesaros por la actitud de vuestro hijo y todo tipo de detalles: animadle a que os cuente su punto de vista y pedidle detalles: sus distracciones en clases, su falta de atención en esta u otra asignatura, sus materias favoritas, sus hábitos, sus amigos y sus relaciones, si es tímido en clase, si es extrovertido…
4. Contacto frecuente y fluido: ganaros la simpatía y la amistad de los tutores y profesores de vuestro hijo. Os permitirá mantener un contacto frecuente con aquellos que deben ser vuestros mejores aliados. Ellos van a ser determinantes en la educación de los niños.

Por su parte, los consejos para los profesores son:
1. Sensibilizad a los padres sobre la importancia de la colaboración con los profesores: transmitidles los valores que se van a trabajar durante el curso para promover que se lleve en casa una misma línea.
2. Implicad a los padres en la reflexión de las actividades de tutoría: pedidles opinión sobre temas a tratar, horario, metodologías, etc.
3. Ofreced a los padres propuestas reales de colaboración con ellos: proporcionadles información sobre temas educativos que les afecten y recursos de interés, como juguetes, libros, webs…
4. Informad a los padres de centros y asociaciones que colaboran en la vida diaria del niño: ayudad a la creación y el trabajo de las Ampas, y combinad las charlas formativas a padres con profesorado del centro y externo.

Cepillo y pasta en la mochila

El nuevo curso escolar acaba de comenzar y si hay algo que los padres no deberían olvidar meter en la mochila de su hijo, aparte del material escolar, es un neceser con cepillo y pasta dentífrica. Sin embargo, todavía son muchas las familias en las que los hábitos de higiene bucodental no están arraigados.

Autor: Alejandra RODRÍGUEZ

Cabe recordar que en el interior de la boca habitan millones de bacterias. Algunas son beneficiosas y sirven para eliminar los restos de comida y azúcares responsables de las caries. Otras son dañinas y erosionan el esmalte dental, o se acumulan peligrosamente dando lugar a la placa bacteriana, una formación dura que se asienta en la base de los dientes y que puede llegar a dañarlos irreversiblemente.

Una higiene dental adecuada sirve para mantener el equilibrio de esta concurrida fauna y contribuye a que los dientes, encías y lengua estén limpios y, lo que es más importante, sanos. Y es que una boca abandonada puede constituir la puerta de entrada de microorganismos responsables no sólo del mal aliento, sino también de enfermedades gastrointestinales, respiratorias e, incluso, cardiacas.

Por todo ello, es especialmente importante inculcar a los chavales unos buenos hábitos higiénicos bucodentales, ya que les serán muy favorables en su edad adulta.

LIMPIEZA                                                                                                                                                                                                      Estas pautas de limpieza deben comenzar a los 6 meses de edad. En este periodo y hasta los 2 años aproximadamente, los padres son, lógicamente, los encargados de esta tarea (mediante el uso de una gasa o un cepillo especialmente diseñado para las delicadas encías del bebé).

Sin embargo, progresivamente, el niño será el que deba tomar las riendas, siempre bajo la supervisión de los adultos, que deberán recordarles los beneficios de mantener la boca limpia. Para hacer la tarea más sencilla existen en el mercado multitud de pastas con sabores agradables y desarrolladas según la etapa de crecimiento del pequeño (encías, dientes de leche, dientes definitivos…).

También los cepillos se han adaptado a las pequeñas bocas infantiles. De esta manera, y aparte de sus divertidos diseños, estos dispositivos están provistos de cerdas mucho más suaves, así como cabezales de menos tamaño para llegar a los lugares menos accesibles y mangos ergonómicos más fáciles de sujetar para el niño. Es más, incluso los cepillos eléctricos se han amoldados a los usuarios de menor edad.

Además, hay que tener en cuenta que los molares y los premolares de los pequeños de la casa presentan surcos muy marcados por la falta de desgaste. En estas hendiduras se acumulan restos de comida muy difíciles de eliminar. El sellado de estas zonas mediante una fina película acrílica que se adhiere a la superficie del diente evita la formación de caries.

PARA UNOS DIENTES SANOS
• CONSTANCIA. Los niños deben aprender a cepillarse los dientes después de cada comida. Si comen en el colegio llevarán un neceser con lo necesario para lavarse los dientes fuera de casa.
• COMPLETO. Hay que insistir en que la higiene bucodental no concierne únicamente a las piezas dentales. Las encías, la lengua y la cara interna de las mejillas también están incluidas.
• SUPERVISIÓN. Aunque el niño debe ir aprendiendo a cepillarse solo, los adultos deben supervisar esta tarea.
• revisiones. Desde los 3 ó 4 años y una vez cada 12 meses, los peques deben ir al dentista para detectar y tratar posibles anomalías, tanto relativas al cuidado de la boca como a la formación de la mordida.
• DIVERSIÓN. Mediante cepillos divertidos, colores llamativos y pastas con buen sabor lograremos que lavarse los dientes sea agradable.
• DAR EJEMPLO.  Si los padres se cepillan los dientes al mismo tiempo que sus hijos lograrán que éstos se habitúen.
• NI MUCHA NI POCA.  La pasta dentífrica no debe colocarse en exceso en el cepillo, ya que puede afectar a los dientes.

 

Jornada de Buenas Prácticas para la infancia en el uso de las Nuevas Tecnologías

Autor: Zaida PÉREZ DE ARANDA

El próximo martes 28 de octubre tendrá lugar en Madrid la Jornada de Buenas Prácticas para la infancia y la adolescencia en el uso de Nuevas Tecnologías, que organiza el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, a través de la entidad pública Red.es, y el Ministerio de Educación para promover el uso responsable de las TIC entre los más jóvenes.

El reto de educar a los chavales de la generación digital se debatirá en esta jornada que busca mostrar nuevas opciones para que los menores hagan un uso de las TIC con garantías, en consonancia con sus necesidades e intereses y al amparo de la Convención sobre Derechos del Niño.

Más información en www.chaval.es.

Festival de cine para la infancia y la juventud

Autor: Sergio LEÓN LACAVE

El próximo mes de noviembre tendrá lugar en Madrid el V Festival Internacional de Cine para la Infancia y la Juventud (FICI) que organiza cada año Tambor de Hojalata, una asociación centrada en la divulgación y defensa del audiovisual entre los más jóvenes. Una peculiaridad de este certamen es que el jurado va a estar compuesto por niños y adolescentes de la Comunidad de Madrid, de entre 8 y 17 años,  elegidos a partir de los participantes en un concurso de selección convocado por el propio festival. Si quieres que tus hijos o alumnos participen y opten a tener la experiencia de ser jurados cinematográficos por unos días, infórmate en las bases en www.fici.info o llamando al 91 522 89 76.